Atenas. Miles de personas se manifestaron ayer en Grecia mientras la banca privada se mostró dispuesta a implementar quizas en enero la quita de deuda griega.Una multitud salió a la calle en Atenas y otras ciudades, aunque la afluencia de manifestantes fue menor de lo esperado. La policía había destacado a 7,000 agentes en la capital ante el temor de que las protestas pudieran tornarse violentas.
En Atenas, unos 300 radicales de izquierda lanzaron bombas incendiarias, quemaron contenedores y rompieron escaparates, sobre todo ante el Parlamento y la embajada de Estados Unidos.
La policía los dispersó con gas lacrimógeno.
Los manifestantes protestaban por el programa de ahorro que tendrá que acometer el gobierno de Papademos en los próximos meses.
Según fuentes oficiales, el nuevo primer ministro, Lucas Papademos, buscaba desesperadamente 57 mil millones de euros.
