Desde 1965, cada 8 de septiembre se celebra el Día Internacional de la Alfabetización. Nuestro país enfrenta uno de sus grandes retos: que para el 2014 todos los ciudadanos sepan leer y escribir.
“Nadie elige ser analfabeto”. La Oficina Nacional de Estadística (ONE) así lo afirma al evaluar la evolución del analfabetismo en un boletín publicado en febrero de 2012. Para no ser una decisión libre, las cifras son escandalosas. Hoy día, 793 millones de adultos en el mundo lo son, siendo las mujeres y niñas el 64% de este índice (507,520 millones), según lo establece la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, UNESCO.
En América Latina y El Caribe, en el periodo que va desde el 2005 hasta el 2007, el analfabetismo alcanzaba el 9% de la población que tenía edad de entre 15 a 24 años, para sumar un total de 36 millones de personas analfabetas. Entre todos estos países, el nuestro se encontraba en el séptimo lugar.
Es la razón por la que en RD se han propuesto mejorar esta situación, que es “producto de una serie de limitaciones básicas relacionadas con la pobreza y la falta de oportunidades en el medio social y económico en el que se desarrolla”, asegura la ONE.
Intentos fallidos
Entre los planes más recientes están el implementado durante el primer período presidencial de Leonel Fernández: la Jornada Nacional de Alfabetización; y el llevado a cabo durante su última gestión (2008-2012) con Melanio Paredes a la cabeza (Ministro de Educación), Patria Letrada, que se proponía alfabetizar en un plazo de tres años. Sobra decir que todos, incluyendo los anteriores a éstos, fueron un soberano fracaso, si justo ahora se lleva a cabo otro con las mismas intenciones.
El proyecto es ambicioso. Para el 8 de septiembre de 2014 el presidente Danilo Medina pretende que el país tenga un índice cero (0) en analfabetismo. El plan Quisqueya Aprende Contigo fue anunciado en el discurso de toma de posesión de Medina en Agosto de 2012 y puesto en marcha en enero de este año. Unos 25 mil voluntarios se sumaban a esta iniciativa que tiene la ventaja de contar con el apoyo del presidente y no sólo con la del Ministerio de Educación.
En el Foro Mundial sobre la Educación, realizado del 26 al 28 de abril en Dakar, Senegal, mejor conocido como Marco de Acción de Dakar, toda la comunidad internacional que participó definió el analfabetismo como una prioridad, prometiéndose erradicarlo para el 2015. Hay muchos que tienen fe, pero en que algunos países no podrán llegar a la meta. ¿Será el nuestro uno de ellos?
Gasto no, inversión
No hay que ser un genio para saber que la educación es el arma más poderosa de un pueblo. Por eso, es compromiso de todos los Estados del mundo, proveer y promover las políticas públicas que sean necesarias para ponerle punto final a esta problemática.
Más allá
Una persona que no sabe leer ni escribir se considera analfabeta absoluta. Si sabe hacerlo, pero no es capaz de intepretar o de realizar cálculos, es llamada analfabeta funcional. “Desde esta perspectiva, la alfabetización no es sólo aprender a leer y escribir, sino adquirir competencias para un efectivo desempeño social y productivo de las personas en la sociedad”. (UNESCO, 2006).
El analfabetismo en la mujer
En el 2006, la UNESCO hizo hincapié sobre las consecuencias del analfabetismo, especialmente en las mujeres. Producto de las investigaciones realizadas, demuestran que limitan el conocimiento y la comprensión de informaciones válidas para su autocuidado, provocando problemas de salud, higiene y nutrición en su hogar, además en el trabajo, en el comportamiento sexual y reproductivo.
Un daño permanente
El Consejo de la Infancia entiende que el niño o niña que no se alfabetiza durante los primeros cinco años de vida: “pierde oportunidades de desarrollo fundamentales y se arriesga a sufrir daños permanentes en su desarrollo”.
Autonomía
La UNESCO eligió como tema para este año “Alfabetización para el siglo XXI”. Su Directora General, Irina Bokova, expresó el deseo que tiene la entidad de que en este siglo todos los niños, no sólo sepan leer, sino que puedan aprovechar esta ventaja para que sean verdaderamente independientes.
Limitaciones
“El analfabetismo, además de limitar el pleno desarrollo de las personas y su participación en la sociedad, tiene repercusiones durante todo su ciclo vital, afectando el entorno familiar, restringiendo el acceso a los beneficios del desarrollo y obstaculizando el goce de otros derechos humanos”. Documento Impacto social y económico del analfabetismo: modelo de análisis y estudio piloto.
Un sueño numérico
El presupuesto estimado para desarrollar el Plan Nacional Quisqueya Aprende Contigo es de RD$1.900 millones. La aspiración del Estado es que 727 mil dominicanos aprendan a leer y a escribir en dos años, de modo que, el 8 de septiembre de 2014, Día Internacional de la Alfabetización, la UNESCO saque de la lista negra a nuestro país por analfabetismo.
Sí se puede
Fiordaliza Encarnación tiene 26 años y se desplaza de La Caleta a los Mameyes para trabajar como empleada doméstica. De sus cinco hermanos, es la única que no sabía leer: “Antes iba a la escuela a pelear y por la comida que daban. No me entraba nada. Estaba como en el limbo y me decía que esto no era para mí”, relata apenada. Decidió aprender a leer y a escribir porque le daba vergüenza que, la mayor de sus tres niños -que tiene ocho años-, le preguntara sobre algo y no supiera qué contestarle. Es en ese momento cuando toma la decisión de estudiar. En esos días, la pastora de la Iglesia Evangélica de su comunidad le habla del programa Quisqueya Aprende Contigo y decide participar.
Después de seis meses de clases, junto a otros 10 compañeros, todos mayores de 40 años, ha aprendido a escribir su nombre, cuáles son los números de su cédula y se desenvuelve “un poco” leyendo.
Aunque ha avanzado, reconoce que todavía le queda mucho camino por recorrer. Con pesar dice que “aún me siento bruta, porque no he aprendido lo suficiente como quiero”. Fiordaliza ha sufrido muchos años de burlas, incluyendo la de su propia pareja. Pero como dice el refrán: “lo que no te mata te hace más fuerte”. Han sido precisamente estas limitaciones las que han impulsado el deseo de superarse. Su tono bajo al hablar, lo recupera de inmediato: “Me siento orgullosa de mí misma”. Fior, como le dicen cariñosamente sus cercanos, quiere inspirar a otros adultos que son analfabetos con las siguientes palabras: “Que no se sientan al menos, que si yo he podido hacerlo, ellos también lo pueden lograr. En la vida, lo que uno se encuentra difícil, al final no lo es”.
No todo está perdido
“Si todos nos esforzamos, nuestro país hecha hacia adelante”. Inés Laureano es optimista. Es lo que revela su jovial tono de voz mientras conversa con nosotros. Se hizo bachiller en una escuela ubicada en un campo de Samaná cuando tenía 19 años (ahora tiene 47), pero los papeles nunca se encontraron y ha tenido que volver a empezar. Está cursando el segundo de bachillerato. Esto no ha sido una barrera para poner en práctica lo que tanto le gusta: enseñar. Por eso, cuando supo del plan Quisqueya Aprende Contigo, no dudó en inscribirse como colaboradora. Llevó su lista de 13 estudiantes (el mínimo son 10) al Ayuntamiento Municipal de La Caleta, que dirige el alcade Jesús Mercedes, y empezó sus clases en la Iglesia evangélica en la que es pastora.
“Mi experiencia ha sido muy buena, porque me he dado cuenta que lo que uno aprende se lo puede enseñar a otros. No todo está perdido”, afirma.
Laureano no se arrepiente de haber donado su tiempo y formar parte de esta iniciativa, a pesar de que no ha recibido el incentivo destinado a los colaboradores (RD$2.000 por mes). P
Cifra
793 millones de adultos en el mundo son analfabetos, siendo las mujeres y niñas el 64% de este índice.
El 8 de septiembre del 2014 es la fecha límite propuesta por la unesco para erradicar el analfabetismo en nuestro país.