Maria Iris Jennitte Olivero, una exempleada de Amazon que dice padecer el síndrome del intestino irritable, asegura que el gigante del comercio electrónico la despidió por ir demasiadas veces al baño cada día en horario laboral, informó este domingo Business Insider.
En julio del año pasado, Olivero fue contratada para trabajar en un almacén de Amazon en Nueva Jersey (EE.UU.) y cuatro meses después le comunicó a un gerente su problema de salud, un trastorno que la obligaba a ir al baño hasta seis veces al día.
Según el relato de la mujer, el gerente le dijo que obtuviera una autorización médica. Al cabo de dos meses le volvió a pedirle el mismo documento, dándole un plazo de cinco días. Sin embargo, según el testimonio de la extrabajadora, la primera cita disponible con su médico era viable en seis días. Cinco días después la despidieron.
Daños y prejuicios por discriminación
Tras perder el empleo, la mujer decidió emprender acciones legales contra Amazon por discriminar a alguien con una discapacidad y no adaptarse a la Ley contra la discriminación del estado. El pasado mes de junio, llevó su caso ante el Tribunal Superior de Nueva Jersey.
“En ese momento, [Olivero] fue informada por [su gerente] de que era ‘demasiado tarde’ para proporcionar una autorización médica y de que era despedida por los demandados”, reza la denuncia de la empleada despedida.
La parte demandante no especificó cuánto dinero quiere pedir por daños y perjuicios. Desde Amazon, que se pronunció a primeros de mes, han indicado que esperan que solicite una indemnización de más de 75.000 dólares.