La vida, uno suele llevarla ordenada de acuerdo con un interés y/o lo que le produzca mayores satisfacciones y placeres. Así funciona la lógica del gusto. En modo alguno caben las sorpresas desagradables, por tanto pocas salidas se les encuentran a los golpes que te conducen a enfrentarte con tus propias convicciones, a desestructurar lo que has levantado con tanto afán. De eso trata este filme que retrata la historia de un padre normal y corrientemente hedonista. Como lo es la cúpula de la sociedad dominante. Y lo hace con tal mesura que convence a quien mire con el rabito del ojo a estos filmes que mezclan “buzz” de Hollywood con cine conceptual. La estupenda historia de una familia que tiene que decidir sobre la vida de uno de sus miembros que ha quedado como un vegetal luego de un accidente, es matizada por la formidable actuación de George Clooney. Y ni hablar del guión y la efectiva dirección de esta película con más de 100 distinciones entre premios y nominaciones; un tipo de cine de cineastas cuya característica principal es sacar la forma humanísticas y realista de retratos familiares de la clase media estadounidense. Sus escenas infaustas ocurren de forma civilizada sin excesiva violencia o dramatismo empalagoso, lo que obviamente permite la reflexión del público. Debido al uso parcial del llamado “efecto V” uno no se identifica totalmente con los personajes pero sí siente que todo lo que les ocurre es lo que también te puede ocurrir, aún las situaciones más cotidianas o inverosímiles. El filme discurre con tanta naturalidad que uno se olvida que es apenas cine. Te hace entrar en una inmersión en las patologías conductuales con humor, casi en un juego sadomasoquista pero con la sigilosa obsesión de hacerte especular con la propia (o impropia) lógica de vida que llevas. Un cine así, hecho con maestría, es para degustar con fruición. Empieza llevada por una voz en off al presentar Hawái como una tierra amarga en lugar del Paraíso en el que los turistas se imaginan. Una tierra en la que muchos se sienten auténticos hawaianos pero en la que todo el mundo, como suele ocurrir, está tan absorto en su propio mundo que ni siquiera se da cuenta de lo que ocurre a su alrededor. A veces incluso en su propia familia Cinco nominaciones al Óscar 2012. En Netflix con ese título.
HHHHH Género: drama y comedia. Duración: 115 minutos.