El sector Paraíso Escondido no precisamente le hace honor a su nombre, ya que las condiciones de ese lugar lo hacen difícil de vivir, debido al abandono al que es sometido por parte de las autoridades.La poca recogida de basura, así como el casual paso de agua potable por las tuberías de la barriada, calles casi intransitables y recibir pocas horas de luz, son de las situaciones que más preocupan a los residentes del sector ubicado en el kilómetro 18 de la carretera que conduce a Yamasá, en San Felipe Villa Mella, Santo Domingo Norte.
Hacer una protesta la pasada semana, fue la única opción que vieron los residentes del barrio para llamar la atención del Ayuntamiento de Santo Domingo Norte. Y todo, para que fueran a recoger los desechos, ya que tenían casi dos meses sin recibir la “visita” de los camiones recolectores.
En tanto que, el pasar de un vehículo por sus calles y levantar polvareda, es el dolor de cabeza de Lourdes del Carmen, quien expresó ser esclava de su pequeño colmado, el cual tiene que estar despolvando en reiteradas ocasiones al día.
“Lo que estamos pasando en este sector es inhumano. El polvo nos está afectando y nos va a matar a todos, incluyendo a los niños”, expresó Lourdes con preocupación, mientras mostraba el polvo que arropaba su colmadito.
Para caminar por las calles en días de lluvias ponen fundas en sus pies
Las madres explicaron el drama que pasan en días de lluvias, cuando los hijos deben ir a la escuela. Tienen que ponerse fundas en los pies y cargar a los infantes. Pidieron al Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), recordar su existencia y pavimentar sus calles.
A la lista de infortunios que afecta el sector no faltó el mal servicio de agua potable. El testimonio de los entrevistados arrojó las calamidades que suelen pasar casi diario para abastecerse del preciado líquido. Tienen que comprar tanques de agua a 50 pesos o cubetas a 25.
El pasado miércoles el alcalde de ese municipio, Francisco Fernández, visitó ese y otros barrios, para conversar con los dirigentes comunitarios sobre los temas que afectan su comunidad, para tratar de buscar una solución. Los residentes dijeron que esperan que Fernández cumpla con su compromiso, de lo contrario volverán a protestar.
