El presidente de la Junta Central Electoral (JCE), Roberto Rosario, dijo ayer que quienes le quitaron las visas se creen con el derecho de decidir quién debe ser o no funcionario público en el país.
Al ser entrevistado luego de ser evaluado por la comisión especial del Senado, Rosario explicó: “yo pienso que esa visa se quita, para ejercer el derecho a veto que creen algunas personas o representantes diplomáticos que tienen en el país, que piensan que pueden decidir quién debe ser o no funcionario público.
Señaló que en función a eso tenía dos opciones, la primera era aceptarlo como una verdad, o por el contrario, enfrentarlos.
“Yo puedo decirle al país, y a mi familia que nunca tendrán una razón de qué avergonzarse de mi actuación, eso que se hizo no será más que un acto de ignominia, y una forma de retaliación que se le revertirá”, manifestó.
El presidente del organismo electoral defendió el derecho que tiene de ser miembro otra vez de la Junta Central Electoral. Dijo que los sectores que consideran que no puede ser ratificado de nuevo están ejerciendo un derecho, igual que lo ejercen otros que creen que debe seguir.
Reúne las condiciones
También fue evaluada Rosario Graciano, miembro de la JCE, quien dijo que cumple con el perfil que propuso la iniciativa por la Institucionalidad Democrática.
“Soy una mujer íntegra, he sido el equilibrio en la Junta, es decir, que tengo inteligencia emocional como ellos quieren y además tengo la capacidad de trabajar en equipo”, destacó.