La política es ciencia y arte, afirmaba con frecuencia el profesor Bosch. Efectivamente, hay que echar manos a diversas ciencias y disciplinas para un buen rumbo político.
Si la economía es bien llevada, beneficia al partido de gobierno; si va mal lo saca del poder. El desequilibrio, que afecte a uno que otro sector, tiene malas consecuencias electorales. De ahí que se apela a estudios del mercado electoral y se realizan mediciones cuantitativas y cualitativas.
Una reciente medición hecha por una empresa contratada por empresarios, Asisa Research, arroja como resultado que el PLD tiene un 56% de simpatía, frente a 34% del PRD; un 72% tiene la percepción de que el PLD es el partido mayoritario y el 24% dice que es el PRD.
Desglosando por edad, de 18-24 años el 70.4% está con el PLD y 24% con el PRD; de 25-34 años, 50.4% con el PLD y 35.9% con el PRD; de 35-44, el 55.3% con el PLD y 33.6% con el PRD.
Luego, por género, el 54.9% de los hombres favorecen al PLD y el 35.6% al PRD; el 57.3% de las mujeres se sitúan al lado del PLD y apenas el 32.6% con el PRD.
En todos los niveles sociales (altos, medios, bajos) el PLD está sobre 53% y el PRD mucho menos de 39%.
Por región, en el DN y Prov. Santo Domingo PLD 59.9% y 64.9%; PRD 23.9% y 23.2%, respectivamente. En Santiago, PLD 64.3% y PRD 33.6%; en el Este PLD 67.3% y PRD 18.7%; en la Línea Noroeste, PLD 67.6% y PRD 32.4%.
Lo significativo es en el Sur, donde el PLD ha sido fuerte y ahora, teniendo un Presidente originario de esa región, el PLD 37.6% y el PRD 59.5%; debemos revisar qué está pasando, puede que se hayan descuidado programas e inversiones sensibles.
Ese bajo porcentaje en el Sur no afecta una candidatura presidencial, pero nos lleva a perder un buen número de legisladores, entre ellos pone en riesgo a 10
senadores.
¿Por qué ese excelente posicionamiento general del PLD?
Cuando hemos dicho que el PIB creció de 22 mil 39 millones en 2004 a 59 mil 938 millones al 2012, lo que está reflejado en esas cifras es el crecimiento del capitalismo.
Sin embargo, se anida la ilusión de que si la economía sigue creciendo favorezca la igualdad de oportunidades, y esas oportunidades no vienen solas, hay que crearlas buscando progresivamente los recursos presupuestales con medidas fiscales porque sino, se convierte en solo retorno del capital y mayores desigualdades.
La fortaleza del PLD está dada en la población donde se ha sentido más el crecimiento del capital (PIB) y se crea la esperanza de que las cosas van a cambiar con políticas públicas en beneficio de la población, con medidas fiscales progresivas sobre el capital para dotar al Estado de los recursos necesarios.
Es lo que se espera de los gobiernos del PLD y por eso estamos en una fase de transición en el proceso nacional, que solo lo garantiza el PLD con figuras probadas. Eso también lo dicen las encuestas cuando aseguran que con Leonel o Danilo no habría segunda vuelta. l