Decenas de miembros de la Organización de Combatientes Constitucionalistas se apostaron ayer frente a la Embajada de Haití, donde pidieron a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), “ponerse en su puesto”.Los manifestantes expresaron su rechazo a la condena de la CIDH contra el país por supuestas violaciones a los derechos de identidad, igualdad, libertad personal, garantías judiciales, protección judicial, a la familia y a la dignidad de los indocumentados haitianos.
“Combatientes unidos, jamás serán vencidos”, vociferaban con pancartas en mano.
Mientras que el presidente de la organización, Virgilio Martínez, dijo que hay países que sí han cometido atrocidades, y la CIDH no ha dicho, “esta boca es mía”.
Sin embargo, dicha Corte condenó a la República Dominicana, cuando es el país que más ayuda ha brindado a Haití, expresó Martínez.
Agregó que “no podemos ser castigados por nadie. Los derechos humanos tienen que ponerse en su puesto porque en el país hay una Constitución y una soberanía. Viven más de dos millones de haitianos ilegales y comen de este país, no nos pueden condenar”.
Los manifestantes dejaron un documento en la Embajada haitiana, dirigido al presidente de Haití, Michell Martelly, donde expresan que este debe tomar cartas en el asunto en cuanto a los haitianos que se querellaron en contra de la República Dominicana.
Expresaron que respaldarán al presidente Danilo Medina en la decisión que tome.
