Percepción presidencial

Estas son mis razones para seguir en el poder, lo demás es falsa percepción. Eso fue el discurso del Uno y Trino Leonel Fernández, acompañado de una triste corte de allegados y funcionarios.

Estas son mis razones para seguir en el poder, lo demás es falsa percepción. Eso fue el discurso del Uno y Trino Leonel Fernández, acompañado de una triste corte de allegados y funcionarios.

Un discurso que nos dejó la impresión de que el control de los resultados de las próximas elecciones es lo que anda buscando el presidente peledeísta, y parece que quiere perder.

Oírlo y verlo como si fuera el candidato a presidente deja la idea de que quienes han perdido la percepción de la realidad son esos que estaban en ese escenario.

Esas razones en los cañones peledeístas para competir en las próximas elecciones le serán de menos eficacia que tirar con balas de salva.
La perorata aburridísima, en presencia de Danilo Medina, será contraproducente.

Esas razones y acomodación cosmética de cifras son las que han creado un estado de malestar general en el país, una incertidumbre en el futuro, y han minado la poca fe que todavía tenemos en nuestras instituciones.

Esas razones, las de Leonel Fernández, y ese mismo discurso que nos ha dado en todos estos años, ya no le lucen y no se da cuenta.
El presidente del PLD, de la RD y de Funglode insiste en decirnos que si el mundo lo tuviera a él como presidente global, todos los males económicos y financieros no hubieran sucedido.

Oírlo y no creer lo que uno estaba oyendo era la única sensación que causaba. Estaba diciendo que las grandes naciones no crecieron, que todo el mundo está en crisis y que sólo RD con él y con el PLD ha crecido y seguirá creciendo.  Que aquí no hay problemas. Parece que tanto insistir en que la gente perciba lo que no es, ha hecho que no se perciba a sí mismo como lo que es.

Si el discurso del presidente de las tres instituciones más acaparadoras del país tiene informaciones reales, entonces ¿por qué se ha modificado varias veces el Presupuesto nacional?, ¿por qué se han reducido las asignaciones a los ministerios?, ¿por qué no se entrega el 4% del PIB que contempla la ley de ingresos y gastos públicos?, ¿por qué tenemos que pagar un paquetazo cada vez que les falta dinero?

Si es cierto todo lo que dijo, ¿por qué tiene que recordar lo malo que los otros lo han hecho?

Quizás sea porque de lo que nos recordamos es de lo mal que estamos ahora, de la corrupción escandalosa de ahora, del despilfarro de ahora, del hartazgo de discursos tergiversadores.

De esas cosas no nos olvidamos porque nos ocurren ahora y aquí, con el PLD y con Leonel Fernández en el gobierno.
Fernando Casanova es abogado

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