República Dominicana pedirá a Naciones Unidas que retire del país su oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados y a su representante Gonzalo Vargas Llosa, quien ha criticado al país por supuestamente fomentar la apatridia.elCaribe se enteró de que la Cancillería dominicana prepara la solicitud oficial en la que alega que la ACNUR no tiene razón de tener una oficina porque en “República Dominicana no hay refugiados”.
Recientemente, Vargas Llosa desató una polémica cuando invitó a Juliana Deguis Pierre a un foro de la ACNUR sobre apatridia en La Haya, Holanda. De ese cónclave y la participación de Deguis aún no se ha dicho nada. República Dominicana fue representada por la vicecanciller Alejandra Liriano.
ACNUR se instaló en el país ocho días después del terremoto que asoló la capital haitiana en enero de 2010.
La organización, que desde 1950 coordina la acción internacional para proteger los derechos de los migrantes en el mundo, también colabora con personas apátridas, es decir, que no tienen nacionalidad o ciudadanía.
Según el portal de esta agencia de Naciones Unidas, el ACNUR ha ayudado a aproximadamente a 34 millones de personas a ejercer el derecho a solicitar asilo y encontrar refugio seguro en otro Estado, pero también a que tengan la posibilidad de regresar a sus hogares de forma voluntaria o de vivir en otro país.
En el debate entró la Cámara de Diputados, que aprobó una resolución que rechaza la campaña internacional contra el país que supuestamente impulsa ACNUR. En su decisión, el hemiciclo condena como una acción desconsiderada y un hecho grave, en perjuicio de la imagen de la nación, la campaña en el exterior promovida por el jefe del ACNUR, Gonzalo Vargas Llosa, que entre otras cosas, acusa al Estado dominicano de propiciar la apatridia. El vocero del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Rubén Maldonado, calificó de nefasta la pretensiones del funcionario de las Naciones Unidas, por lo que llamó al país a repudiar esas acciones.
Vargas Llosa publicó artículo sobre sentencia
El 3 de noviembre del 2013, el premio Nobel de Literatura, Mario Vargas Llosa, padre de Gonzalo, escribió un artículo en el diario español El País, en el que lanzó duras críticas a la sentencia 168-13 emanada por el Tribunal Constitucional, la que calificó como “una aberración jurídica y parece directamente inspirada en las famosas leyes hitlerianas de los años treinta dictadas por los jueces alemanes nazis para privar de la nacionalidad alemana a los judíos que llevaban muchos años (muchos siglos) avecindados en ese país y eran parte constitutiva de su sociedad”.