Hay circunstancias en las que la vida no te deja opciones, simplemente debes sacrificar lo más valioso para ti, para dar una mejor existencia a otros, y disponer de tu tiempo, recursos y hasta de tus sueños, en detrimento de tus propias necesidades. Y todo luce más hostil e injusto cuando la adversidad te visita, acentuando la situación. Sin embargo, aunque la vida es dura, Dios siempre es bueno. No pasará de largo frente a tu causa, aunque parezca haber tardado, te regalará una nueva temporada y una gran recompensa. No nos cansemos de hacer el bien, porque a su tiempo cosecharemos, si no desmayamos. Nuestro trabajo en el Señor no es en vano.
¡Pasa la prueba!
Hay circunstancias en las que la vida no te deja opciones, simplemente debes sacrificar lo más valioso para ti, para dar una mejor existencia a otros, y disponer de tu tiempo, recursos y hasta de tus sueños, en detrimento de tus propias necesidades.R