Apaciguados los ánimos en el barrio Gualey tras el accidente que en mayo pasado dejó varios heridos luego de la caída de un canasto lleno de varillas que era levantado por una grúa, sumado al reclamo de reubicación de cientos de familias, los trabajos de la segunda fase de la línea dos del Metro de Santo Domingo marchan a buen ritmo.
Más de dos mil obreros de 30 compañías contratistas trabajan en los tres kilómetros de longitud que habrá de recorrer el ferrocarril, que conectará el puente de la 17, desde el río Ozama hasta la carretera Mella, frente al centro comercial Megacentro.
Casi la mitad de los trabajadores está concentrada en la colocación de las nueve fundaciones o zapatas, dos de las cuales tienen una profundidad de 70 metros, que soportarán el puente colgante de 727 metros de longitud, cuyo diseño asemejará al puente Juan Bosch.
Otro frente trabaja en la excavación del túnel minero, que va desde la prolongación de la avenida Venezuela hasta la carretera de Mendoza, y que según la Oficina para el Reordenamiento del Transporte (Opret) ha avanzado 250 metros y se aproxima a la avenida Fernández de Navarrete, en la conocida bomba de Los Mina. Otro grupo avanza en dirección Este-Oeste, y se acerca a Megacentro.
Las excavaciones han obligado al cierre temporal de dos tramos de la avenida San Vicente de Paúl, los cuales están bloqueados con muros “new jersey”, causando grandes taponamientos durante las horas pico.
El subdirector de la Opret, Leonel Carrasco, aseguró a elCaribe que la institución ha indemnizado a casi la mitad de las 800 familias afectadas por la obra y que están a la espera de los fondos para compensar a otro grupo de 150 familias en Gualey. Añadió que en la parte de Los Mina, no es preciso hacer más desalojos.
En total la Opret habrá de entregar RD$50 millones a las familias afectadas en las márgenes del río Ozama.
Admitió que el accidente de mayo retrasó la obra pero que no es nada considerable ya que se eligió la ruta crítica más corta para cruzar el afluente.
“Si los fondos fluyen cumpliremos”
Carrasco no quiso aventurarse a precisar la fecha estimada para la terminación de la megaobra y aseguró que todo dependerá de cómo fluya la erogación de los US$285 millones presupuestados, por parte del Gobierno central.
“Si los fondos fluyen nosotros vamos a cumplir, pero eso va a depender de que los fondos fluyan. Si ellos (el Gobierno) fluyen, nosotros cumpliremos para el período constitucional del presidente Danilo Medina”, dijo.
El funcionario se mostró optimista en que el Plan Maestro, iniciado por el expresidente Leonel Fernández en el año 2005, que proyecta la construcción de futuras líneas de trenes que atravesarán la ciudad de Este a Oeste y de Norte a Sur, deberá continuar en los próximos gobiernos.
Se ampara en que el proyecto ferroviario está inscrito en la Ley 01-2012, de Estrategia Nacional de Desarrollo, lo que obligará a los gobernantes a seguir desarrollando este sistema de transporte.
En ese sentido, afirmó que la Opret dejará listos los emplazamientos para la continuación de esta línea y llevar el metro hasta San Isidro en el mediano plazo y dotar del servicio al millón de habitantes que reside en el municipio Santo Domingo Este. “Necesariamente hay que dejar todo preparado para cuando se inicien los trabajos en la línea que en el futuro vamos a hacer”, afirmó Carrasco, quien dijo que los barrios de Maquiteria, Villa Duarte, Los Palmares, Villa Liberación y Los Trinitarios serán algunos de los sectores que se aliviarán de los tediosos tapones.
Dijo que no habrá gobierno que pueda desestimar el desarrollo de la obra, ya que la misma población la va a exigir.
Carrasco reconoció la confianza depositada en la Opret, por parte del presidente Danilo Medina para embarcarse en el desarrollo del proyecto pese a las dificultades económicas al principio de su mandato. “Aunque fuere de la forma que estamos hoy haciendo las cosas, es digno y de honor reconocer que el presidente está cumpliendo con su palabra”.
Trayecto de línea 2 fue recortado por recursos
Aunque inicialmente la línea Dos fue concebida para iniciar en Los Alcarrizos y concluir en San Luis, el trayecto fue recortado de 34 a 13.8 kilómetros, y actualmente comprende desde la avenida Gregorio Luperón hasta el puente Francisco del Rosario Sánchez o de la 17. La Red Maestra prevé la construcción de otras cuatro líneas. Una que nace en Los Bajos de Haina, cruzará los ríos Haina y Ozama y finalizará en el ensanche Isabelita del municipio Santo Domingo Este. La línea 4, que inicia en la Plaza de la Bandera y cruzará subterráneamente la avenida Luperón hasta el kilómetro 9 de la autopista Duarte, e interconectará con la línea dos. La línea 5, desde el ensanche Isabelita, donde finaliza la línea 3 y recorrerá por debajo la avenida San Vicente de Paúl hasta Megacentro. Finalmente, la línea 6 está programada desde las inmediaciones del liceo La Normal Juan Pablo Duarte y se extenderá hasta la Ciudad Colonial.
Dice deterioro estaciones es por falta de fondos
Carrasco atribuyó el deterioro que se observa en algunas estaciones en funcionamiento en la pintura externa, filtraciones y salida de funcionamiento de algunos ascensores y escaleras eléctricas, a los atrasos del Gobierno central en la erogación de los fondos que van destinados a la partida de mantenimiento y operaciones. Sostuvo que el atraso corresponde a más de cinco meses. Dijo que el uso diario de las instalaciones (escaleras, ascensores) por parte de 210 mil personas que diariamente utilizan el servicio, obliga a un mantenimiento constante, al igual que los trenes, que deben ser revisados, limpiados y fumigados todos los días.
El subdirector de la Opret afirmó que el presupuesto anual que recibe esa institución equivalente a RD$1,350 millones no alcanza para cubrir las obligaciones y que operan con un déficit de aproximadamente RD$350 millones.