El Ministro de Hacienda, licenciado Daniel Toribio, anunció al país la semana pasada que el Consejo de Ministros había aprobado el sometimiento al Congreso Nacional del Proyecto de Presupuesto de Ingresos y Ley de Gastos Públicos para el año 2012, el cual establece un aumento en el gasto del gobierno de RD$39,524 millones, al pasar de RD$390,476 millones en el 2011 a RD$430,000 millones en el 2012.
Al mismo tiempo informó que el financiamiento con préstamos internos y externos del Presupuesto del 2012 ascenderá a RD$78,000 millones, inferior a los RD$97,259 millones del año 2011.
De lo anterior se desprende que el Gobierno del PLD está proyectando que el total de los ingresos corrientes, los ingresos de capital (excluyendo desembolsos de préstamos) y las donaciones para el año 2012 ascenderán a RD$352,000 millones, resultado que se obtiene al deducir del gasto total, el monto que se cubrirá con desembolsos de préstamos internos y externos (RD$430,000 – RD$78,000= RD$352,000). Esta suma equivale al 15.1% del PIB que se proyecta para el 2012.
En el 2011, se había estimado que el total de los ingresos corrientes, los ingresos de capital y las donaciones ascenderían a RD$293,216.8 millones. Sin embargo, el comportamiento de los ingresos durante los primeros 8 meses del 2011, período en el cual los ingresos corrientes, de capital y donaciones ascendieron a RD$186,518 millones, implicaría que para el año 2011 completo, el total de los ingresos corrientes, de capital y donaciones alcanzarán RD$285,000 millones. Ese monto representará el 13.6% del PIB que se ha estimado para el año 2011.
Visto lo anterior, se puede concluir que en el Presupuesto del 2012 se está asumiendo un aumento de RD$67,000 millones en los ingresos corrientes, de capital y donaciones, con relación a lo que se proyecta recibir en el 2011. Este resultado se obtiene comparando los RD$352,000 millones de ingresos corrientes, capital y donaciones establecidos en el Presupuesto del 2012, con los RD$285,000 que se proyectan recibir en el 2011, partiendo de la ejecución del período enero-agosto (RD$352,000- RD$285,000 = RD$67,000). En otras palabras, en el Presupuesto del 2012 se está asumiendo que los ingresos corrientes, de capital y donaciones que recibirá el Gobierno, aumentarán en 23.5%.
¿Es posible un crecimiento de 23.5% en los ingresos corrientes, de capital y donaciones en el 2012 con relación a los que se terminarán recibiendo en el 2011? Veamos. El propio Ministerio de Hacienda ha estimado que el PIB real crecerá en 5.5% en el 2012 y que la inflación terminará en 5.5%.
Partiendo de esas informaciones, se podría deducir que el PIB nominal, es decir, el PIB a precios corrientes, que las autoridades del área económica del Gobierno están proyectando para el 2012 estaría creciendo en aproximadamente 11.3%. Si el PIB nominal crecerá en 11.3% en el 2012 como proyecta el equipo económico del Gobierno, ¿cómo entonces es que piensan obtener un incremento de los ingresos corrientes, de capital y donaciones de 23.5%?
De los RD$67,000 millones de incremento proyectado en los ingresos corrientes, apenas RD$32,205 millones podrían ser sustentados por el aumento esperado en el PIB nominal si se asume, contrario a la evidencia de los últimos años, que un aumento de 1% en el PIB nominal se traduce en un aumento de 1% en los ingresos del gobierno. En el 2009, por ejemplo, el PIB nominal creció en 6.5% pero los ingresos corrientes, de capital y donaciones del Gobierno Central disminuyeron en 8.6%.
En un momento llegué a pensar que este aumento extraordinario de los ingresos corrientes, de capital y donaciones para el 2012, podía deberse a los ingresos fiscales que reportaría el inicio de las exportaciones de oro por parte de la Barrick Gold. Pero las exportaciones de esa empresa, según se ha informado, comenzarían a partir del segundo semestre del 2012, estimándose que el Gobierno recibiría ingresos por unos RD$1,009.8 millones si las exportaciones se realizan a un precio promedio de US$1,650 la onza. Como vemos, ni el aumento nominal del PIB ni los nuevos ingresos fiscales a ser aportados por Barrick Gold pueden sustentar el incremento de RD$67,000 millones en los ingresos del Gobierno estipulados en el Presupuesto del 2012.
Una posibilidad sería una nueva reforma tributaria. Sin embargo, el 20 de mayo del 2012 en el país se celebrarán elecciones presidenciales y se nos hace cuesta arriba pensar que el Gobierno esté pensando en un aumento de impuestos en medio de un proceso electoral. Tampoco después, pues dudamos que el Presidente Fernández quiera abandonar el poder dejando como su último legado al pueblo dominicano otro aumento de impuestos.
Otra alternativa sería una ejecución de gastos públicos inferior a la que se estaría presupuestando para el 2012. La situación es más crítica si se tiene en cuenta que apenas se han presupuestado US$300 millones al sector eléctrico cuando en este año la asignación alcanzará US$700 millones.
Recordemos que en el 2011 se presupuestaron US$350 millones para el sector eléctrico y luego de comprobar que se había incurrido en un error, el Gobierno tuvo que enviar al Congreso una modificación al Presupuesto, recortando el gasto a varios ministerios para poder aumentar las transferencias al sector eléctrico a US$700 millones.
La reducción dramática de US$700 a US$300 millones en el 2012 en la asignación al sector eléctrico, sólo sería posible si el Gobierno tiene entre sus planes aumentar considerablemente la tarifa eléctrica, pues en el panorama no se percibe que los precios del petróleo puedan caer a US$40 el barril como promedio anual del 2012, ni que la tasa de cambio pueda reducirse a RD$25 por dólar.
Una última posibilidad es que en vez de obtener financiamientos por RD$78,000 millones en el 2012 como ha recogido la prensa a partir de las informaciones dadas por el Ministro de Hacienda, el Gobierno decida obtener un monto mayor. ¿Sería esto posible? No mientras tengamos un acuerdo con el FMI.
Pero el acuerdo termina en febrero del 2012. Una vez concluido, el presidente Fernández, que se ha sentido inconforme con las limitaciones al endeudamiento neto (desembolsos de préstamos menos amortizaciones) que le ha impuesto el FMI en el 2011 y en el 2012, podría instruir a sus ministros a que se olviden de esa restricción y le agencien al gobierno niveles de endeudamientos superiores a los estipulados en el presupuesto, posiblemente en el mercado interno.
Con la mayoría que tiene el PLD en el Congreso, no sería difícil obtener la aprobación de nuevos endeudamientos para compensar por recaudaciones menores a las proyectadas en el Presupuesto del 2012.
Esta opción no puede descartarse en la medida que se observa cómo el presidente Fernández luce cada día más inclinado a apuntalar la candidatura presidencial de su partido, hasta el punto de afirmar que su esposa, la licenciada Margarita Cedeño de Fernández, sería una “excelente vicepresidente de la República”.
Leonel y Danilo conocen mejor que nadie el impacto que puede tener el uso del presupuesto nacional, y por tanto, el poder el Estado, en una contienda electoral. El primero disfrutó un triunfo en el 2008 apuntalado por el desbordamiento de más de RD$55,000 millones del gasto público en los primeros 5 meses de ese año.
El segundo sufrió una derrota en el 2007, en la contienda interna por la candidatura presidencial de su partido, tal y como reflejó cuando afirmó: “me venció el Estado”.
Dado que se estaría aprobando un presupuesto abultado de RD$430,000 millones, que no puede ser financiado con los ingresos corrientes, de capital y donaciones que se han proyectado, no podemos descartar que una vez desaparezcan las restricciones del FMI, el gobierno peledeísta desguañangue la economía con endeudamientos internos abiertos o encubiertos, con el objetivo, esta vez fallido, de perpetuar en el poder el continuismo del despilfarro, la corrupción y la incapacidad para resolver los grandes problemas que enfrentan la Nación y las familias dominicanas: la creciente criminalidad y delincuencia, el insoportable costo de la vida y el elevado desempleo.
Los artículos de Andy Dauhajre en El Caribe
pueden ser leídos en www.miprd.org/andy
