Macbeth es una tragedia de William Shakespeare acerca de la ambición desmedida y la traición. A pesar del éxito de sus propósitos, el personaje principal continúa intranquilo a causa de la profecía que las brujas “sanjuaneras” le hicieran un día: En este país cualquier cosa puede pasar. Ambición y traición. Los peligros más temidos que encierra la política. La ambición es el rasgo principal del carácter de los políticos, y la causa de su ruina.
A lo largo de la obra, Macbeth y su esposa sufren varias visiones, así como intranquilidades por las huellas de delitos, como cuando intentan lavar manchas de sangre imaginarias de sus manos. Es que el delito se queda impregnado para siempre, aunque creas que te has salido con la tuya. No hay momento del día que no recuerdes haber engañado, traicionado o matado para satisfacer las ansias de dinero, poder o un oscuro objeto de tus deseos.
Nuria Piera ha presentado un informe forense sobre Félix Bautista, quien tiene borrosas fronteras entre la propiedad personal y la de los organismos del Estado en que ha ejercido. Alguien lo ha bautizado “El bolsillo derecho de su jefe”, porque no es posible que alguien se mueva con tanta impunidad, arrojo y al margen de la ley sin que quien lo haya puesto en la posición oficial no esté en complicidades con él.
La serie de reportajes de Nuria sobre la corrupción administrativa hacen de esa comunicadora una “rara avis”, pues lo habitual es que se aireen los actos de corrupción y los abusos de los gobiernos de turnos en función a intereses personales inmediatos; en el caso de Nuria no hay gobierno favorito, a todos les ha tratado con la misma medicina: la denuncia valiente.
El momento político dominicano está marcado por el secuestro de casi todas las instituciones del Estado por el actual presidente, quien cual Macbeth, movido por la ambición y la traición a todo principio, se mueve entre la duda y el miedo sobre qué le depara su futuro. Entre un Hipólito Mejía que promete que meterá a la cárcel a quienes robaron, y un Danilo Medina que sabe que si gana tendrá que quitarle el control del PLD y del Congreso o perecerá en su intento de gobernar. Así las cosas, tenemos que Nuria Piera hace el trabajo que no hacen los fiscales anti-corrupción, la infame Comisión Nacional de Ética y Combate a la Corrupción, o la sociedad dominicana que está mirando para otro lado cuando sabe que un señor está secuestrando el Estado dominicano.
Nuria, Macbeth, Félix Bautista, las élites de este país y todos los demás, estamos ante un dilema shakesperiano.