El profesor Rafael Núñez Grassals, formador de varias generaciones de periodistas, cuestionó ayer la debilidad del periodismo dominicano y su falta de rigurosidad.“Al periodismo dominicano le falta muchas cosas. Es un periodismo débil, débil. Y en algunos casos muy abanderado”, dice. Lamenta que los periodistas de hoy en día tengan poca disposición a buscar el dato y analizarlo y, por el contrario, sujeten su ejercicio a la visión que se quiere propagar desde la oficialidad de la fuente, sin ningún criterio de cuestionamiento y ponderación.
“Para mí el funcionario más importante de un periódico cualquiera que sea, no importa el soporte, si es de papel, si es digital o televisivo, es el reportero. Pero ése está siendo sustituido por escribanos de escritorio, gente pegada a un teléfono que es lo que hay hoy o ´copy paste´ de la Internet”, asegura. Núñez Grassals, de 69 años, acaba de recibir, y pondera con la humildad que le caracteriza, el Premio Nacional de Periodismo 2012, otorgado por la Presidencia de la República en base a un veredicto del Ministerio de Educación y el Colegio Dominicano de Periodistas (CDP).
Como en las aulas, desde la sala de su residencia, el reputado profesional reivindica la necesidad de ejercer un periodismo apegado a la ética y por la búsqueda constante “del dato” preciso. También aboga porque los medios informativos se despojen de la visión oficialista y permitan que la población y la gente sin poder político y económico se exprese y se haga escuchar.