En 1 Juan 5:4, nuestro Señor Jesús nos habla con el acento de la autoridad implacable cuando dice: “…y esta es la victoria que ha vencido al mundo, nuestra fe”. La fe nos hace invencibles e incansables. Nos trae de vuelta a las arenas del combate con el orgullo de los gladiadores. Fe no es simplemente derribar gigantes, es sepultar al parásito que quiere erigirse a costa de tu alma; cortarle la cabeza a la serpiente que se desliza silenciosa sobre tus ilusiones, robando tus? ?bríos e? ?inspiración, fe es callar las tormentas clandestinas que sacuden tus rutinas de oración, para robarte la eficacia de tus convicciones y separarte de tus bendiciones.? ?Fe es saber que luchar es nuestro propósito y vencer es nuestro destino.
¡Nuestro destino!
En 1 Juan 5:4, nuestro Señor Jesús nos habla con el acento de la autoridad implacable cuando dice: “…y esta es la victoria que ha vencido al mundo, nuestra fe”. La fe nos hace invencibles e incansables. Nos trae de vuelta a las arenas del…