El ministro de Interior y Policía, José Ramón Fadul (Monchy), dijo este jueves no entender qué es lo que quieren quienes critican que se extendiera por un año la vigencia de los carnés a los extranjeros que vencen a partir del 17 de este mes.
El funcionario explicó que lo que ha hecho el Gobierno es ahorrarse 200 o 300 millones de pesos y que de todos modos ya tienen el reconocimiento facial, los nombres y localización de las personas que lograron un estatus migratorio regular en el país.
Dijo, además, que la medida da la oportunidad a los extranjeros de continuar sus vidas con normalidad.
“No es prórroga, estamos estabilizando el problema migratorio en el país. Acuérdense que Haití es un país amigo, son 10 millones de habitantes igual que nosotros. La isla tiene 20 millones de habitantes”, aseveró el funcionario en el Palacio Nacional.
Calificó de racistas a los que critican y argumentó que si los extranjeros fueran en su mayoría “rubios y de ojos verdes” los aceptarían sin protestar.
Al referirse a la delincuencia, reconoció un aumento de la ratería, pero precisó que el Gobierno la combate no solo con la Policía Nacional, sino también con el Sistema Nacional de Emergencias 9-1-1.
El ministro enumeró los lugares donde hay mayores índices de delincuencia entre los que citó el Gran Santo Domingo, el Distrito Nacional, San Cristóbal, Santiago e Higüey.
Pidió a la población respaldar a la Policía Nacional.