Un procurador adjunto archivó de manera definitiva la querella incoada por Luis Álvarez Renta en contra del Procurador General de la República, Francisco Domínguez Brito.Mediante el dictamen número 35, el procurador adjunto Ramón Arístides Madera declaró inadmisible la denuncia de abuso de autoridad, usurpación de funciones y desacato a una orden judicial, interpuesta por Álvarez Renta, condenado por el desfalco al Banco Intercontinental (Baninter), luego de que, según este, el procurador Francisco Domínguez Brito ordenase que no se ejecutara la prisión domiciliaria por un año que le había otorgado el juez de ejecución de la pena de San Cristóbal.
En su disposición argumenta que el procurador lo único que hizo fue atacar mediante un recurso de apelación, disposiciones monstruosas e ilegales, y que la acusación es absurda, y no se corresponde con la verdad.