Lula da Silva asume cargo en medio de protestas

Río de Janeiro. Luiz Inácio Lula da Silva rindió juramento el jueves como jefe de gabinete de su sucesora, la presidenta Dilma Rousseff, insistió que él le ayudará a encarrilar el país y denunció intentos de derrocarla.

Río de Janeiro. Luiz Inácio Lula da Silva rindió juramento el jueves como jefe de gabinete de su sucesora, la presidenta Dilma Rousseff, insistió que él le ayudará a encarrilar el país y denunció intentos de derrocarla.Los detractores del Gobierno consideran que el nombramiento de Silva es un descarado intento por evitar una posible detención como parte de una enorme investigación por corrupción en la petrolera estatal Petrobras.

Sólo la Corte Suprema brasileña puede autorizar que un miembro del gabinete, como lo es ahora Lula da Silva, responda por acusaciones en un proceso penal.
La investigación ha implicado a decenas de figuras públicas de todo el espectro político y a destacados empresarios. Es una de varias crisis que afectan al país cinco meses antes de que se celebren los Juegos Olímpicos de Río, y que incluye una creciente y profunda recesión y un fuerte brote de zika.

Protestas

La rabia que generó el nombramiento de Lula dio lugar a protestas en Sao Paulo, donde manifestantes con muñecos inflables del exmandatario, vestido como presidiario, bloquearon la arteria central en esta zona metropolitana de 18 millones de habitantes.

En la capital, Brasilia, tres manifestantes fueron arrestados tras enfrentamientos con partidarios del Gobierno.

En otro giro inesperado de esta historia, un juez emitió una orden para suspender el nombramiento de Lula da Silva, aunque funcionarios del Gobierno aseguraron que sería anulada en una corte de apelaciones.

En la ceremonia de juramentación reinó un clima de campaña política, con una multitud que prorrumpió en consignas a favor del Gobierno.

En un discurso combativo, Rousseff dijo que contaba con Lula da Silva, su “gran amigo, gran compañero”, para que la ayudara a sacar al país de sus dificultades económicas y políticas. Juró que “el griterío de los golpistas no me desviarán de mi rumbo, ni pondrán a nuestro pueblo a ponerse de rodillas”.

La presidenta, cuyo índice de aprobación ha caído a menos del 10%, enfrenta un posible juicio político en el Congreso y pedidos de que renuncie en las calles.

Rousseff fustigó la inesperada difusión el miércoles de unas grabaciones de conversaciones telefónicas entre Lula da Silva y varias figuras prominentes, incluida la propia presidenta. Sergio Moro, el juez que encabeza la investigación en Petrobras, las dio a conocer horas después del anuncio del nombramiento de Silva y sostuvo que parecen insinuar que hubo intentos para influenciar a las autoridades judiciales a favor del expresidente.

La presidenta calificó las grabaciones de ilegales y su difusión de “claro intento de sobrepasar los límites del estado democrático”.

“Sacudir la sociedad brasileña por medio de mentiras, maniobras furtivas y prácticas muy criticadas viola las garantías constitucionales y sienta precedentes muy graves”, dijo Rousseff. “Así es comienzan los golpes”.

Investigaciones

Hace dos semanas, la policía condujo a Lula da Silva a una comisaría para que respondiera preguntas sobre el escándalo de Petrobras, y los opositores consideran su regreso al Gobierno una manera de evitar problemas legales. En cambio, los partidarios del Gobierno insisten en que el expresidente cumplirá un papel crucial para bloquear el juicio político contra Rousseff por presunto mal manejo de fondos fiscales.

Tanto Rousseff como Silva han negado reiteradamente haber cometido delito alguno mientras que el gigante sudamericano, un país de 200 millones de habitantes, enfrenta crisis en varios frentes.

La investigación de un enorme plan de sobornos en la petrolera estatal Petrobras ha implicado a la elite política y empresarial del país. Brasil, además, es el país más afectado por el brote de zika, que según los científicos puede provocar defectos de nacimiento cuando ataca a mujeres embarazadas.

La economía sufre la recesión más grave desde la década de 1930, con aumento de la inflación y anuncios diarios de despidos que provocan miedo y
desesperación. Y en medio de todo, Río de Janeiro será la sede de los Juegos Olímpicos en agosto. El domingo, unos tres millones de personas marcharon contra el Gobierno en diversas ciudades. Se planeaban nuevas protestas para el jueves y viernes.

Uruguay insta a respaldar a Rousseff

El presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez, quien además preside temporalmente la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), envió a los países de este bloque un proyecto de declaración de respaldo a su homóloga brasileña Dilma Rousseff en el marco de la crisis política que atraviesa ese país. Así lo expresó en Montevideo el canciller uruguayo, Rodolfo Nin Novoa, quien calificó la situación en Brasil como “una situación compleja y grave” y mencionó que hay “acuartelamiento de tropas” en ese país.

Conforman comité que decidirá sobre juicio

Eduardo Cunha, presidente de la Cámara baja y enemigo de Rousseff, conformó el comité que decidirá si se debe seguir adelante con el juicio político contra la mandataria. La decisión fue celebrada en la plenaria de la Cámara de Representantes por opositores que sostenían pancartas que decían “juicio político ahora”, mientras que aliados de Rousseff coreaban “no habrá un golpe de Estado”. Este es el primer paso en un largo proceso que incluye múltiples votaciones en la Cámara de Representantes y el Senado.

Posted in Sin categoría

Más de

Más leídas de

Las Más leídas