Madrid. Sin agua potable, con dificultades para alimentarse a diario, pero enganchados a Facebook y Whatsapp. Más de la mitad de los latinoamericanos que apenas tienen acceso a los bienes básicos, están sin embargo conectados en las redes sociales.Así se desprende de un estudio elaborado para El PAÍS por el Instituto para la Integración de América Latina (INTAL), dependiente del BID, y la Corporación Latinobarómetro. La penetración de las nuevas tecnologías en la región camina más rápido que la inclusión social y la igualdad.
“Si bien existe una brecha de uso significativa –entre 10 y 15 puntos– entre quienes declaran problemas sociales y quienes no, existe un alto porcentaje de personas que, aún en situación de vulnerabilidad, usa redes sociales”, apunta el informe. El 57% de los participantes en la encuesta –más de 20.000 ciudadanos de 18 países de la región- que reconoció haber carecido durante el último año de suficiente comida para alimentarse “a veces o seguido” dispone de Facebook, Whatsapp o Youtube. El porcentaje de usuarios de redes sociales sin acceso a agua potable alcanza el 51%.
La última década de bonanza económica y precios altos de las materias primas ha propiciado una ligera reducción de la pobreza en la región. Aun así, el 28% de los latinoamericanos viven en la exclusión según los últimos datos de CEPAL. En ese mismo periodo, el número de usuarios de internet se multiplicó por tres de acuerdo al Banco de Desarrollo de América Latina (CAF). Pasó del 17% en 2005 al 53% en 2015. Aún lejos en todo caso de países desarrollados de la OCDE, donde se registran tasas de alrededor del 82%.
El perfil del usuario latinoamericano coincide con el internauta medio. “Se observa en general una mayor utilización a menor edad, mayor nivel educativo y socioeconómico”, confirma el informe del BID. Por ejemplo, el 81% de los menores de 24 años están conectados a Facebook. Mientras que sólo el 10% de los mayores de 65 es usuario, y aún menos de Twitter (2%) o Instagram (1%).