La tormenta tropical Isaac, afortunadamente no llegó a convertirse en huracán y pasó relativamente distante del territorio dominicano. Sin embargo, tras su paso dejó un amplio campo nuboso con lluvias y vientos constantes en las últimas horas.
Las actividades oficiales fueron suspendidas ayer, y aunque el sector comercial laboró con normalidad, la presencia de clientes era reducida. Disminuyó el tránsito y la gente sólo salía a las calles para realizar acciones específicas.
Los vientos y el oleaje del mar Caribe se sintieron con fuerza en la avenida George Washington o malecón, en el Distrito Nacional, así como en la avenida España, en Santo Domingo Este. Ambas vías fueron cerradas por las autoridades.
En la región Suroeste fue donde más se sintieron los efectos de la tormenta Isaac; afortunadamente no se perdieron vidas humanas y los efectos o daños materiales fueron mínimos. Las brigadas de la Defensa Civil debieron desplazar a miles de familias residentes en zonas vulnerables. También trabajaron retirando a los curiosos, turistas y dominicanos, que se acercaban al mar Caribe para observar las gigantescas olas que arrastraban piedras hasta la avenida.
