Luz María Abreu comenzó a identificarse con los ideales y el pensamiento político de Max Puig desde los años en que ella era estudiante y él profesor universitario.La candidata vicepresidencial de Alianza por la Democracia (APD) es muy tímida a la hora de enumerar sus aportes a lacampaña de esta organización que hoy desata sus amarras con el oficialismo y busca en solitario el ascenso al Poder Ejecutivo, con su participación en las elecciones del domingo. Sin embargo, entiende que una de las razones para que la escogieran como compañera de fórmula del presidente del partido es que la valoran por su conexión con los movimientos sociales.
“No me correspondería a mí juzgar, pero he escuchado que soy un punto de articulación con las organizaciones sociales. También desde la sociedad civil algunas organizaciones me han hecho sentir su acercamiento a la sociedad política tras esta candidatura. Si esto fuera así estaría más que satisfecha”, responde la socióloga, promotora de los derechos de la mujer.
Programa
A la conformación del programa de gobierno de la APD entiende que aportó con la concepción de procesos participativos, la definición de la participación como metodología para la construcción de ciudadanía, además, contribuyó a “visibilizar la mayor pobreza y abandono de la gente de las lomas; las prioridades e intereses estratégicos de las mujeres”.
Abreu asegura que le ha resultado fácil integrarse a la campaña como acompañante del también sociólogo Puig, porque comparte con la APD valores similares y tienen la misma visión de país, además de que coinciden en una experiencia de trabajo por el desarrollo de la población dominicana.
La idea de que esta mujer, nativa de Jarabacoa, asumiera la candidatura para los comicios del 20 de este mes surgió, según cuenta, de una asamblea ciudadana con caficultures, celebrada en Azua el año pasado.
La fuerza política, sin que Abreu lo supiera entonces, había definido unos criterios para perfilar su postulación a la Vicepresidencia. Las cualidades requeridas incluían que fuera una mujer, con los principios afines a los de la organización, y que fuera extrapartido.
Esta activista de la sociedad civil y luchadora por la equidad de género y contra la violencia intrafamiliar entiende que puede ser útil como encargada del área que, en un potencial gobierno de la APD, le asigne Max Puig, una vez investido como presidente de la República Dominicana.
Tiene una trayectoria en la lucha feminista
Luz María Abreu Lantigua estudió en la Universidad Autónoma de Santo Domingo. Allí se enroló en el grupo estudiantil BRUC, liderado por Max Puig y el hoy fenecido Miguel Cocco, dirigentes de los Comandos Revolucionarios Camilo Torres (Corecato). Fue por ocho años directora ejecutiva de Mujeres en Desarrollo Dominicana (MUDE) y fue la primera coordinadora general del Centro de Solidaridad para el Desarrollo de la Mujer (Ce-Mujer).
¿Cuál ha sido su vinculación con la APD y cómo se llegó a la decisión de que usted acompañara en la boleta a Max Puig?
Mi candidatura fue sugerida en una Asamblea Ciudadana con caficultores, celebrada en Azua a finales del año pasado. Juzgo que fue posible porque coincidía con los criterios definidos por la APD, de los que yo me enteraría mucho más tarde, de una candidatura que fuera encarnada por una mujer, con los principios adecuados a esta organización, y que ella fuera externa.
Mi encaje en la organización y la campana ha sido fácil porque compartimos valores similares, tenemos la misma visión de país y ha habido una experiencia de trabajo común, siempre por el desarrollo del país, con la mayoría de sus dirigentes.
Desde mi época de estudiante en la UASD, donde el doctor Max Puig era profesor, compartí el contenido ideológico de sus apuestas y milité en el grupo estudiantil (BRUC) que seguía las orientaciones de la organización que contaba con su liderazgo y el de Miguel Cocco, de los Comandos Revolucionarios Camilo Torres (Corecato).
Su sentido del deber, la adopción de decisiones correctas y a tiempo me generaban fascinación en aquellos tiempos. Con el tiempo me daría cuenta que sus valores habían impregnado mi carácter, que el ejemplo suyo y de Miguel Cocco, nos conminaba a la gente de mi generación a una única forma de vida posible: la compatible con la dignidad y la ética; con un amor irrenunciable a los demás seres humanos que nos hizo abrazar la causa de la justicia desde cualquier instancia donde nos desempeñemos. Somos muchas las personas forjadas en esta escuela en distintas parcelas políticas o espacios de la sociedad civil.
¿En qué usted cree que ha sumado a la candidatura de Puig?
Es un poco difícil responder esto sin correr riesgos; no me correspondería a mí juzgar, pero he escuchado que soy un punto de articulación con las organizaciones sociales. También desde la sociedad civil algunas organizaciones me han hecho sentir su acercamiento a la sociedad política tras esta candidatura. Si esto fuera así estaría más que satisfecha.
3- ¿Ha hecho algún aporte, sugerencia o adendum al programa de gobierno de la APD?
Creo que he podido aportar a la implementación de procesos participativos, a la definición de la participación como metodología para la construcción de ciudadanía; a visibilizar la mayor pobreza y abandono de la gente de las lomas; las prioridades e intereses estratégicas de las mujeres.
4- ¿Si llega a la Vicepresidencia, le gustaría encargarse de algún área específica? ¿Cuál?
Estoy preparada para encargarme de lo que el doctor Max Puig considere. Mi lugar será aquel desde cual sirva mejor al pueblo.
5- ¿Cuáles son las principales cualidades con las que describiría a su compañero de boleta? El doctor Max Puig se caracteriza por ser solidario, capaz, honesto y valiente.
