Por años se ha visto a presidentes y funcionarios vestir un elegante traje blanco el día de la toma de posesión o juramentación presidencial, la razón por la que es así está relacionada con las estaciones del año.Durante la era de Trujillo el mandatario utilizaba en las ceremonias que eran celebradas durante el día un traje blanco conocido como Chaqué, que estuvo de moda durante los 90, el mismo se caracterizaba por tener una chaqueta larga en la parte de atrás.
Mientras que en las actividades ceremoniales que eran programadas durante la noche, el vestuario ideal era el famoso Frac o traje de calle color negro, que solo difiere del anterior en el largo de la chaqueta.
Laixa Lizardo Montolio, encargada de las giras presidenciales de la Dirección de Ceremonias de Protocolo del Palacio Nacional, explica que con el pasar del tiempo el traje Chaqué fue pasando de moda y quedando en desuso al igual que el traje diplomático.
“Es así como dos instrumentos de vestuario fueron quedando desfasados, esto pasaba también de forma paralela con la vestimenta formal diplomática, que consistía en un uniforme muy antiguo que iba bordado con hilos de oro. Esa vestimenta también de muchos años estaba entrando en desuso por la complejidad que llevaba”, relató la experta en protocolo.
Montolio asegura que en 1973 el entonces presidente Joaquín Balaguer dispuso mediante decreto que el traje sería blanco para las ceremonias que fueran realizadas entre los meses de verano y oscuro para las ceremonias que fueran llevadas a cabo en los meses de invierno.
Esa es la razón por la que la juramentación presidencial o toma de posesión que cae en el mes de agosto y se considera todavía verano, es de blanco, pero las que son en febrero como la rendición de cuentas es con traje negro.
El próximo martes Danilo Medina utilizará su traje blanco y con ello no sentirá tanto calor como otros presidentes de los 90.