Londres, – El príncipe británico Felipe fue operado del corazón y se le introdujo un stent por una obstrucción en una arteria cardíaca, informó un portavoz del Palacio de Buckingham en la noche del viernes.
El esposo de la reina Isabel II y duque de Edimburgo debió ser internado en un hospital tras sufrir fuertes dolores en el pecho. La intervención con el objetivo de dilatar la arteria que irriga sangre al corazón resultó exitosa.
Felipe, de 90 años, se encontraba en la residencia de Sandringham, donde la familia real se disponía a pasar la Navidad. Al sufrir fuertes dolores, fue trasladado en helicóptero a una clínica especializada en problemas cardiovasculares que se encuentra en Cambridge.
En primera instancia, desde Buckingham habían informado que la internación del hombre que está casado hace 64 años con Isabel II se debía a una medida de precaución.
Hasta el incidente de hoy, el estado de salud del príncipe era considerado excelente, aunque en octubre debió cancelar una visita a Italia tras sufrir un resfrío luego de un viaje de 11 días a Australia.
Además, desde que cumplió 90 años en junio ha reducido sus apariciones públicas.