Santiago.-Para la Iglesia Católica reto grande por delante el nuevo Jefe Policial Nacional tiene es devolverle la tranquilidad a al pueblo, debido a que los delincuentes pretenden hacer del territorio nacional un infierno.
“Deberá continuar con el adecentamiento y profilaxis dentro del Cuerpo del Orden, sacando aquellos miembros, no importa el rango, que tanto daño le han hecho a su imagen con actuaciones dolosas que se transforman en traición a la Patria”, apunta en el editorial del semanario Camino.
Dice que para lograrlo necesitará del apoyo de sus compañeros de uniforme para que no sean obstáculos en los planes que tiene para desempeñar su labor de manera ejemplar.
“Para lograr este sueño, de vivir en paz, que deseamos convertir en realidad, el general Castro Castillo necesitará el apoyo del Gobierno, dignificando la vida de los policías, facilitándole a la Institución los recursos necesarios que le permitan a sus miembros desempeñar su noble misión con eficiencia, porque cuentan con los equipos suficientes sin tener que andar mendigando, y siendo presas fáciles de quienes los corrompen”, indica.
Camino dice que el cuento a la seguridad ciudadana el panorama es sombrío, pero tiene un pueblo generoso que se une frente a las graves dificultades que se le presentan y la inseguridad ciudadana es una de ellas.
Cree que el nombramiento hecho por el Presidente Danilo Medina al designar al Mayor General Manuel Castro Castillo como nuevo jefe de la Policía Nacional debe contar con el apoyo de varios sectores.
Refiere que su nombramiento llega en un momento en que la seguridad ciudadana se vuelve trizas, aunque con el patrullaje mixto de policías y militares hubo cierto respiro, aunque saben que esa no es la solución.
Finalmente, agrega, que es un medicamento para un paciente moribundo, pero que continúa en estado de coma, porque cada día nos sorprenden nuevos atracos, robos, asesinatos.
