Santiago.-La Iglesia Católica advirtió que de continuar los ciudadanos tomando la justicia por sus propias manos, el país llegará a un espacio primitivo y salvaje en donde nadie estará seguro.
Indica que los linchamientos son un desafío para las autoridades, porque estas acciones vandálicas hablan de la orfandad que siente la población frente a los que le han quitado el sosiego.
“A los que participan de esta orgía, atacando a una persona acorralada hasta verla morir lentamente, parece que se les embotó la conciencia, olvidando el mandato divino de: no matarás”, apunta el editorial del semanario Camino.
La Iglesia refiere que cada día se observan más escenas es de terror, odio, venganza y sadismo en el que turbas enardecidas y furiosas torturan a seres humano hasta quitarle la vida en plena vía pública.
Expresa que si no se le pone fin a esta barbarie tendremos que aceptar que el Estado de derecho en nuestro país es una quimera.
Entiende que ese un espectáculo perverso y criminal.
Cree que estos hechos se atribuyen a la impunidad que permite a los que tienen poder económico y político burlarse de las leyes porque para ellos no hay castigo, enviando así un mensaje negativo a los demás, que concluyen aceptando que el robo es la mejor vía para ascender socialmente en el país, olvidando que una sociedad construida sobre la base delincuencial y corrupta se derrumba como castillo en la arena.
Explica que si queremos vivir un presente y futuro luminoso para todos es urgente tomar medidas eficaces que frenen la desigualdad social que tenemos.