De una manera casi absoluta, los Warriors de Golden State han volcado toda la atención de la NBA hacia ellos.
No es para menos. Su récord de 22-0 y la más que brillante actuación de Stephen Curry, su principal jugador, ha hecho que muchos ignoremos la buena temporada que llevan, por ejemplo, los Hornets de Charlotte, el equipo de la leyenda Michael Jordan, o lo súper bien que han estado los Spurs de San Antonio y los números de MVP que lleva Kawhi Leonard.
El regreso por lo alto de Paul George con los Pacers de Indiana es otro tema que la vorágine del Golden State se ha tragado.
Para ser claros, no digo que esos desempeños no han recibido atención de los medios y de los fanáticos. Sí, han sido tomado en cuenta, pero no de la forma como hubiesen sido tratados si los Warriors no tuviesen volando por encima de radar como ha sido hasta ahora.
La NBA en estos momentos gira alrededor de Golden State y de Curry. No es que LeBron James, Kevin Durant, Russell Westbrook, James Harden, Chris Paul y otros jugadores élite de la liga han sido relegados a un segundo plano. Es que los Warriors y Curry están por encima del plano habitual de la NBA. Para ser más llanos: ellos son 100 y Curry es 150.
Las estadísticas así lo indican, no es un capricho mío. Hay una infinidad de números que pueden convencerlos a ustedes de mi expresión anterior.
Prometo que para una próxima entrega compartiré cifras pocos habituales que seguramente harán que lo del 100 y el 150 parezca algo muy claro.
En honor a la verdad, pienso que algunos de ustedes ya deben empezar a pensar en el 72-10 de los Bulls de Chicago de 1995-96. A pesar de tener claro que se trata de una campaña de 82 partidos y de no ser muy dado a impresionarme con poca cosa, yo lo hice cuando la racha estaba en 11. Realmente me convencieron de que pueden lograrlo.
Muchas teorías se ciernen en el horizonte, especialmente cuando usted entiende que no romperán el récord de los Bulls. La realidad es que noche tras noche Curry y los Warriors rompen una por una dichas teorías.
Lo mejor de Golden State es que en lo adelante enfrenta una temporada de 60 partidos. Durante la estación de 2011-12, recortada a 66 juegos por el paro laboral, los Bulls de Chicago y los Spurs de San Antonio ganaron 50 partidos. Como ven, nada es imposible. Empiecen a creer.