Con motivo de la celebración del Día Internacional de la No Violencia contra la Mujer, la Fundación Vida sin Violencia realizó un “Té por la paz”.El evento contó con la participación de más de 300 personas que se identificaron con los trabajos educativos de prevención realizados por la entidad.
Las palabras centrales del acto estuvieron a cargo de Yanira Fondeur de Hernández, presidenta de la fundación, quien resaltó que la actividad constituía un encuentro para unir voluntades de corazones nobles y solidarios en búsqueda de una ciudadanía fortalecida en valores, donde reine una cultura de paz, que permita la sana convivencia.
“Saber que en nuestro país cada dos días una mujer es asesinada por su pareja o expareja, dejando dos y tres niños huérfanos; que decenas reciben mutilaciones y que las agresiones verbales y físicas son comunes en gran parte de las relaciones familiares, nos compromete a actuar y no sólo lamentarnos, a trabajar por su prevención para que no siga sucediendo y a reclamar nuestro derecho ciudadano a vivir en paz”, expresó Fondeur de Hernández.
Explicó que con las recaudaciones de las ventas de esta actividad benéfica continuarán desarrollando sus proyectos de prevención de la violencia intrafamiliar y de género, tanto en el sector de Los Girasoles y a nivel nacional, para crear conciencia sobre la importancia de detener la violencia.
La actividad tuvo como escenario las instalaciones del salón principal del Club Naco, el cual fue decorado con elementos que resaltaban los valores y cualidades positivas que deben reinar en las relaciones de pareja, como son solidaridad, tolerancia, respeto, justicia, equilibrio, amor y paz, entre otras.
Un jurado integrado por Esperanza Ligtgow, Pedro Vargas, Danny Méndez, Miriam de Herrera y Lucía Amelia Cabral, eligieron las cinco mesas mejor decoradas, las cuales recibieron premios como: un año en el gimnasio en el Body Shop de Bella Vista, 20 sesiones de belleza de Figurella, un fin de semana en el hotel Punta Cana, un collar de Michelle Selman y un fin de semana en un hotel de Bávaro.
