Luis Flores siente que el solo hecho de estar peleando por un puesto en la selección nacional de baloncesto le convierte en un ganador. El veterano escolta permaneció casi dos años sin jugar, siguiendo órdenes médicas después de someterse al procedimiento de células madres en ambas rodillas.
Flores viene de una breve incursión con los Guaros de Lara, en Venezuela, y ahora quiso probarse tratando de formar parte de un joven combinado quisqueyano que buscará un ticket a los Juegos Olímpicos de 2016 durante el torneo Preolímpico de Las Américas, evento que será del 31 de este mes al 12 de septiembre. “El simple hecho de que esté aquí para mí es una ganancia”, le dijo Flores a elCaribe al término de una sesión de entrenamientos de la selección. “Si quedo o no en el grupo estaré contento, porque se me dio la oportunidad y porque me pude medir con los demás. Si no puedo ir como jugador, iré como fanático para aportar y ayudar al grupo, pues pienso que lo importa no es que sea Flores atrás sino Dominicana adelante”.
Flores, un exjugador de la NBA, no integra la selección dominicana desde el torneo Preolímpico de Mar del Plata, Argentina, efectuado en 2011.
El jugador de 34 años debutó con la escuadra tricolor en el Centrobasket de La Habana, Cuba, en 1999, y después de ahí estuvo en otros ocho equipos nacionales, incluido el que fue al Preolímpico de 2011 bajo el mando del dirigente John Calipari. Han pasado 16 años desde esa primera vez y todo luce indicar que el tiempo no ha transcurrido en vano para este jugador nacido en San Pedro de Macorís, quien habla y piensa con la sabiduría que ofrece el inexorable devenir de los años. “El simple hecho de que esté aquí ahora mismo es una bendición de Dios”, afirmó. “Porque cuando me lesioné el doctor me dijo: ‘retírate, porque ya tú no podrás regresar por esa molestia en la rodilla’. Y gracias al doctor Chiqui (Leonel) Liriano en Santiago, el famoso doctor de Bartolo Colón (lanzador de Grandes Ligas), que me hizo las células madres y otros procesos médicos, he podido regresar”, afirmó.
Flores entiende que existen muchos jugadores de su posición y que el hecho de que alguien o él no haga el equipo no significa que no sea un buen baloncestista, sino que es lo que más conviene a la escuadra, por lo que entendería cualquier decisión del cuerpo técnico del conjunto local que lidera el norteamericano Kenny Atkinson. Reconoce el nivel elevado con el que practica el núcleo joven del equipo, aunque eso no significa que no esté cónsono con el patrón a seguir dentro del combinado. “El baloncesto es igual, no importa quienes sean los integrantes, ya sea LeBron (James) o Jordan (Michael). Todo el que me conoce sabe que siempre me he mantenido en un nivel muy alto”, apuntó. “El atletismo se puede dominar con la mente. Eso es algo que uno adquiere a través de la experiencia, que lo físico en baloncesto viene siendo 30% y el otro 70% es la paciencia y lo que uno aprende a través del tiempo”.
Flores reveló que debido a su larga experiencia en el deporte podría dedicarse a ser coach cuando llegue el momento del retiro.