Evangélicos pidieron ayer a las autoridades educativas retirar de las escuelas públicas el libro de educación sexual “Hablemos”, alegando que su contenido viola la Constitución y la ley 136-03 sobre protección de niños, niñas y adolescentes.Según José Alberto Ortíz, de Acción Cristina, el texto establece como algo “correcto” la conducta homosexual, la introducción de niños a la fantasía sexual y el erotismo, así como las técnicas de autoestimulación sexual en grupo.
“Se enseña la parafilia como conductas que no son anormales o aberradas, incluso conductas que están reñidas con las leyes penales como la pedofilia”, expuso.
Ortíz sostuvo que todo contenido que se enseña en los centros públicos, debe estar amparado por la ley, lo que no ocurre con ese libro, del que según dijo, el Ministerio de Educación realizó una licitación para imprimir unos 22 mil ejemplares, que luego fueron distribuidos en los centros de media a través de Profamilia. “La enseñanza de la educación sexual en su marco legal debe estar fundamentada en la Constitución y en la ley general de Educación y ese manual viola la Carta Magna, la ley de Educación y la ley de niños, niñas y adolescentes”, puntualizó.
Mientras que Fidel Lorenzo, presidente del Consejo Dominicano de Unidad Evangélica (Codue), entiende necesario que el Ministerio de Educación retire el libro “Hablemos”, porque el mismo incentiva a la promiscuidad.
“Ese libro ha sido licitado por el Ministerio de Educación y mandado a imprimir sin la aprobación del Consejo Nacional de Educación”, agregó Lorenzo.
Ambos hablaron en el Congreso Nacional, donde acudieron como invitados del bloque de diputados peledeísta, como parte de un proceso para consensuar el proyecto de ley de Educación Sexual y Reproductiva, de la autoría de Cristian Paredes.
Baret revela que hay una revisión de libros
En ese ínterin, el ministro de Educación, Carlos Amarante Baret, reveló que esa cartera realiza un profundo proceso de revisión los libros de textos que se utilizan en el sistema educativo nacional, para asegurar que sus contenidos contribuyan a una mejor formación de los estudiantes de las escuelas públicas y privadas. “Vamos hacia una nueva enseñanza”, agregó.