Mientras los estudiantes lanzaban piedras a las autoridades, éstas se enfrentaban con perdigones a los manifestantes. La protesta surge poco después de que los diputados convirtieran en ley el Presupuesto Nacional.
Las protestas surgieron alrededor del campus universitario de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, lo que provocó que los alumnos salieran despavoridos de los alrededores.
Los estudiantes también quemaron neumáticos y lanzaron basura a las calles. Los policías por su parte, arrojaron bombas lacrimógenas para dispersar a los rebeldes.
Las autoridades educativas aun no han informado la suspensión de clases.
Los estudiantes y empleados de la UASD se manifestaron en contra de la aprobación del Presupuesto, alegando mayor partida para la casa de estudio.