Su energía en escena no se manifiesta con la intensidad en que lo conseguía en los 80, pero Emmanuel, su música y su propuesta, son tan buenos como siempre.
El pasado fin de semana el teatro La Fiesta del hotel Jaragua se vistió de gala para recibir al astro de la música romántica de México, quien con su propuesta “Emmanuel acústico” sigue conquistando el aplauso del público.
Nuevamente en el país, gracias al empresario Pedro García, que volvió a salir por la puerta grande con el carismático artista, el intérprete de “El día que pueda” se hizo dueño de dos noches en las que tuvo como invitado especial a su hijo Alexander Acha.
Vestido de negro y zapatos brillosos, interpretando la canción “Bella señora”, el artista dio inicio a su vibrante concierto y desde que el público escuchó su voz de inmediato reaccionó eufórico aplaudiendo intensamente.
Acompañado de 11 músicos y tres vocalistas, el artista se hizo sentir en todo momento, luego de varios años desde su última presentación en nuestros escenarios. Sus dos presentaciones, viernes y sábado, estaban vendidas en su totalidad.
Un cancionero envidiable
Luego de concluir su segunda canción, “Tengo”, Emmanuel agradeció a sus fanáticos por estar presente en su show. “Buenas noches, gracias por estar aquí.
Gracias por sus corazones, sus sonrisas y gritos, espero que la pasen bien, vamos a divertirnos y a pasarla bien, y sobre todo que me acompañen, porque sin ustedes no sería Emmanuel”, expresó emocionado el cantante.
Mientras continuaba el concierto se podía ir apreciando a un Emmanuel fresco, renovado y lleno de vida, que aunque no estuvo rodeado de bailarines pudo conquistar a todos los presentes con sus movimientos y anécdotas entretenidas de su paso por la vida.
Canciones como “En otra Vida”, “Este terco corazón”, “Tengo mucho que aprender de ti” y “Rey azul”, el carismático artista deleitó al auditorio que estuvo lleno de “tope en tope”.
Ya para finalizar su exitoso concierto, que se prolongó durante casi dos horas, Emmanuel interpretó “El día que pueda” y un popurrí en el que mezcló varios de sus éxitos más emblemáticos.
Y como era de esperarse, la gente empezó a pedir un poco más gritando “¡otra!” y “Emmanuel, sin ti se hunde este país”, este para complacerlos a ritmo de tambores cantó “Corazón de melao”
El relevo de una nueva generación romántica
Al introducir un piano al escenario, el cual muchos creyeron que sería tocado por Emmanuel, y tras una breve historia de cómo los padres toleran las ocurrencias de sus hijos, éste presentó a su hijo Alexander Acha, que tocó el piano y junto a su padre interpretó la canción “Sentirme vivo”.
Después, Emmanuel se retiró del escenario, dejando solo al joven cantante, momento que éste aprovechó para conquistar al público con canciones de su autoría, como “Amiga”, “Mujeres”, “Gracias• y “Te amo”.
De esta manera, Alexander demostró ser digno hijo de uno de los más queridos de la música romántica, que con aplausos y gritos la gente lo despidió.
“Gracias, muchas gracias a todos, ahora los dejo con mi papá”, manifestó Alexander para despedirse del público.