La implementación de una serie de medidas, algunas de carácter obligatorios, permitieron controlar la propagación del cólera, que lleva 149 muertos en el país.El Ministerio de Salud Pública destacó la colaboración prestada por el Colegio Médico Dominicano (CMD) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) a los programas de combate a la enfermedad que ha matado a más de 6,000 personas en Haití, en donde se desató en octubre del año pasado.
Esas medidas contribuyeron, además, a mejorar las infraestructuras hospitalarias y a dotar a algunas zonas de servicios que no tenían, como es el caso del agua potable y la construcción de letrinas.
Junto a los ayuntamientos, las autoridades sanitarias prohibieron la venta de alimentos cocidos en las calles, frituras, jugos y empañadas, y se ofrecieron charlas en las escuelas, colegios, hospitales y en las comunidades.