Santiago. La Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santiago está a punto de tocar las alarmas, debido al dramático descenso de la presa de Tavera.De acuerdo con el gerente de operaciones de Coraasan, Héctor Jáquez, al embalse entran menos de 10 metros cúbicos por segundo y salen 24. Este estado ha llevado a las autoridades a declarar que están ante una situación grave, por lo que llaman a la población a tomar conciencia y dar un mejor uso al líquido que llega a los hogares y a las empresas. En la actualidad se producen menos de 108 millones de galones por día, cuando la demanda supera los 134 millones de galones, razón por la que se hace necesario un racionamiento del servicio que sirve Coraasan a la población. La entidad también llamó la atención de las fugas por problemas en las tuberías de los hogares y en las que hay colocadas de manera subterráneas y que en ocasiones no se reflejan, debido a que hay muchas propiedades que aún carecen de medidores.
Llaman a ahorrar
Jáquez llamó a la población a ser más consciente de la situación y usar el agua solo en las tareas que son necesarias para no desperdiciar el líquido que hace falta en otros hogares. En otras ocasiones Coraasan ha advertido sobre los lavaderos de autos improvisados, mojar jardines, calles o conucos, aunque en esta ocasión no ha anunciado sanciones, como se hizo el año pasado cuando se vivió una situación similar.
En los diferentes sectores se ha sentido una disminución en la presión del agua, sobre todo en los edificios de apartamentos, así como en la frecuencia con que se envía a los hogares, lo que ha generado quejas, ya que no se ha reprogramado el servicio y no se cumple con los horarios que se habían establecido para hacer frente a la crisis, la que se agrava con la prolongada sequía.
Línea Noroeste está en emergencia por la sequía
Se recuerda que el país, al igual que Puerto Rico, vive una prolongada sequía que afecta la agricultura, debido a la disminución en el caudal de los ríos y canales de riego. Esta situación se ha hecho dramática en pueblos de la Línea Noroeste donde los productores de arroz y banano, así como ganaderos han declarado la zona en emergencia por las pérdidas millonarias en su producción.