Un grupo de diputados propuso ayer al Jefe de la Policía la ejecución sumaria de los criminales que intercepten los agentes del orden. La medida busca reducir los niveles de inseguridad que en estos momentos existen en el país y fue sugerida por los legisladores justo cuando la Comisión de Interior y Policía de la Cámara Baja daba cumplimiento a la resolución que llevó al mayor general José Armando Polanco Gómez a explicar los recientes abusos de fuerza cometidos por miembros de la institución. Uno de estos casos es la muerte del estudiante universitario Willy Wander Florián Ramírez y del reo de San Francisco de Macorís Jeffry Sandoval.
“Y, cuando vayan a darle pa´ abajo (asesinar) a delincuentes, no se dejen ver de los medios de comunicación”, recomendó el diputado Héctor Darío Féliz, representante de Pedernales por el Partido Revolucionario Dominicano (PRD).
Minutos antes Alfredo Martínez, legislador de Santo Domingo Este por el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), se mostró molesto con Polanco Gómez porque en su momento no se “ajustició” a José Manuel Arias Mejía (alias Bacanay), uno de los detenidos por la agresión armada cometida contra la ingeniera Francina Hungría, hace dos semanas.
Durante el encuentro con Polanco Gómez también abrazaron la idea de los fusilamientos de criminales los congresistas Francisco Matos (PLD-Santiago), Manuel Díaz (PLD-San Cristóbal), y Luisín Jiménez (BIS-Santo Domingo), quien fue el primero en hacer la propuesta en el hemiciclo.
Contra la ley
Los diputados se pronunciaron en estos términos a pesar de que en República Dominicana no existe ninguna ley que respalde el fusilamiento sumario ni otro tipo de pena de muerte.
Todo lo contrario, en su artículo 37 la Constitución promulgada el 26 de enero del 2010 protege la vida humana desde la concepción hasta la muerte. Este artículo fue refrendado tanto por el PRD como por el PLD, y se complementa con el artículo 42, donde se protege la integridad de los individuos.
“Si te matan a un hijo tuyo es que tú vas a decir que los fusilen”, advirtió a uno de sus compañeros el diputado Díaz.
Ante esta lluvia de sugerencias, el jefe policial guardó silencio.
El diputado Luisín Jiménez dijo a elCaribe que otros tantos congresistas respaldan su idea hasta el punto que, si alguien presenta un proyecto de ley a favor de la pena de muerte, fácilmente podría recibir el voto positivo de la mayoría de la Cámara.
La actividad fue presidida por Elpidio Báez, presidente de la Comisión, y contó con la presencia del general de brigada Víctor Campusano Jiménez, subjefe de la Policía, y el director de la Autoridad Metropolitana de Transporte (Amet), el general Juan Gerónimo Brown Pérez.
La resolución que le dio origen a la interpelación del jefe policial es el resultado de la indignación de varios legisladores.
Cuando se le preguntó si la ley permite o no el fusilamiento de las personas apresadas por la Policía, uno de los diputados presentes en el salón Hugo Tolentino Dipp de la Cámara de Diputados sólo respondió: “Qué ley ni ley, ese no es un problema de ley”. Su actitud es similar a la de otros tantos legisladores creadores de leyes y fiscalizadores del Estado.
Jefe de la PN critica la debilidad del Código
El jefe de la Policía Nacional aseguró que crímenes como el que padeció recientemente la ingeniera Francina Hungría ocurren por la debilidad del Código Procesal Penal.
A modo de ejemplo, Polanco Gómez dijo que José Manuel Árias Mejía (alias Bacanay) ya había sido acusado de asesinato y otros delitos comunes cuando participó del asalto a la ingeniera, que perdió el ojo derecho y corre el peligro de perder el otro ojo como consecuencia del disparo que recibió en el rostro.
El comandante policial además refirió el caso del asesino de la odontóloga Rosanna Rafaela Liriano Liriano, de 31 años de edad, cuando llegaba a su apartamento en el Mirador Norte. El responsable, según la Policía, antes había participado de un asalto al Hotel Meliá de Santo Domingo, sin recibir penalidades por el delito.
“Estamos obligados a aguantar todos esos casos”, criticó el mayor general en abierta crítica al procedimiento oficial de la persecución del crimen. Polanco Gómez además considera negativo la construcción de cómodas cárceles modelo para los delincuentes cuando, a su juicio, lo que falta al país es una estructura de máxima seguridad y restricción.