No permitas que finalice este año sin que te hayas reconciliado con aquellas personas con las que, por alguna diferencia, decidiste alejarte o ellas se alejaron de ti.
Busca un acercamiento antes de que llegue el 2012; que en el nuevo año estés libre de toda raíz de amargura, que puedas abrazar y felicitar a todos tus familiares y amigos.
Es verdad que a veces aun en los mejores hogares surgen situaciones que afectan nuestra relación, pero con un poco de disposición se pueden sanar las heridas y te vas a sentir con nuevos ánimos para seguir adelante.
La Biblia dice en efesios 4:32 “Sé benignos unos con otros, misericordiosos, perdonando os unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo”.
Si lo haces así, experimentarás la dicha del perdón y tus oraciones a Dios no tendrán estorbo.
