Recientemente se celebró el Día Mundial del Diabético. Esa fecha pretende recordar a todos los ciudadanos del mundo sobre lo que significa esta patología para la población del planeta.
Esta dolencia no respeta edad, sexo ni religión y menos ubicación geográfica. Las cifras son impresionantes y ya es un tema de agenda de salud de cualquier nación.
La incidencia de diabetes va en incremento y lo hace de forma galopante. Cada día nuevos diabéticos debutan y sólo la mitad de ellos aproximadamente se entera de su enfermedad, ya que es en el momento de las complicaciones donde reciben la infausta noticia de que son diabéticos. Se estima que el 15% de los dominicanos ya están padeciendo la enfermedad.
La obesidad así como el sedentarismo son los grandes responsables de que cada vez las cifras sean mayores. La dieta del dominicano muy rica en grasas y carbohidratos son combustibles para que se den las condiciones fisiopatológicas de la enfermedad.
Con motivo de la fecha, el Hospital General de la Plaza de la Salud realizó un acto con la presencia de pacientes diabéticos, los cuales recibieron reevaluaciones y orientaciones en relación con el autocuidado y formas de evitar las complicaciones. Se les entregó además una medalla, la cual representa el símbolo mundial de la diabetes y les sirve para ser identificados en caso de emergencias.