Para los que están aéreos en el tema, he aquí el detalle del meollo del asunto: resulta que, Cuevana es una web creada por tres argentinos, entre ellos Tomas Escobar, y que permite ver películas gratis; superando en calidad y actualización a otros servicios pagados como Netflix y, evidentemente por ser gratis, se ha vuelto popular.
Esa “generosidad” de no cobrar, tiene sentido. Los creadores han admitido que “hoy la tendencia en internet es lo gratuito”. De hecho, saben que la descarga de los filmes y series que ofrecen perjudica los derechos de autor y, en ese sentido, según afirman, aspiran a lograr un acuerdo con los productores para difundir legalmente sus contenidos. “Nos gusta pensar que estamos contribuyendo al cambio. Cuando las productoras decidan dar el primer paso, daremos el nuestro’, dijeron una vez. Empero, aunque los usuarios no pagan y, a su vez, Cuevana no paga a los autores ni productoras, el sitio tiene un ingreso por pauta publicitaria y la financiación de “usuarios interesados”.
Ahora, encima de todo eso, el sitio de Internet que suma alrededor de dos millones de visitas por día tiene un nuevo bloqueo a su contenido por parte del servidor Iplan. El problema de acceso al sitio, que afecta exclusivamente a los clientes del servidor Iplan, fue denunciado por Cuevana desde su cuenta oficial de Twitter.
En medio de los cruces legales, Cuevana ha cambiado el diseño de su plataforma, acelerando la interfaz y estrenando de forma exclusiva películas producciones independientes, como estrategia de hacer buenas relaciones con las productoras.
Sin embargo, el modelo sigue siendo polémico desde el punto de vista legal. Y Tomas Escobar, el que de los tres creadores ha dado más la cara, lo sabe; de hecho en una entrevista dijo: “Queremos empezar a reconvertir el sitio, a proponer un modelo que funcione. Pero está el asunto de que los usuarios adoptaron a Cuevana como propio porque defiende sus necesidades y ahora Cuevana tiene deudas con esos usuarios”.
Pero, pese a ese pensamiento, existe la pregunta: ¿Cuevana podrá existir sin trastornos legales? Muñecas y bicicletas a quienes contesten…