A nueve días de las elecciones no existen elementos que puedan generar dudas sobre la calidad de la administración del proceso y el respeto a la voluntad popular que deberá expresarse en las urnas el próximo 15 de mayo. Dos acontecimientos ocurridos durante la semana, como los resultados positivos de la auditoría al padrón electoral dados por Latinobarómetro y la flexibilidad mostrada por la JCE al disponer el conteo manual del 100% de los votos a nivel presidencial, permiten generar una mayor credibilidad en los comicios.
La automatización del registro de los concurrentes y del escrutinio en los colegios electorales, tiene el propósito de mejorar la eficiencia en el conteo de los votos y de reducir los márgenes de errores en el llenado de las actas, sobre todo en el nivel congresual. Sin embargo, esta novedad ha generado incertidumbres en distintos sectores, debido principalmente a la tardanza en la llegada de los equipos al país, a la falta de una auditoría técnica previa y a los resultados arrojados por las pruebas que se han realizado hasta el momento. La última decisión del órgano electoral, atendiendo a solicitudes de partidos políticos y de organizaciones de la sociedad civil, apunta a suscitar confianza en esta nueva tecnología electoral.
El conteo manual a nivel presidencial permitirá constatar la fiabilidad de los equipos y su apego a la decisión de los electorales. En tal sentido, no es necesario el conteo manual en todos los niveles de las elecciones. Esto tampoco es una obligación establecida por la ley electoral. Si esta tecnología funciona bien, y genera la confianza necesaria, deberá contribuir a reducir significativamente el tiempo del escrutinio y a evitar, sobre todo en la elección de los legisladores, las conocidas manipulaciones fraudulentas en favor de un candidato dentro de un mismo partido o en beneficio de un partido grande en perjuicio de los más pequeños.
Adicional a la decisión anunciada esta semana, la JCE debe dejar claramente establecido en el protocolo para el escrutinio automatizado, que el mismo se realizará conforme a lo consignado en el artículo 127 de la ley electoral. Esto quiere decir que las boletas deberán ser previamente mostradas a las autoridades de los colegios electorales y a los delegados de los partidos políticos en todos los niveles del proceso. Cumplido esto, no debe haber motivo de preocupación sobre la confiabilidad de las elecciones. Los distintos actores del sistema político deberán trabajar por unos comicios sin traumas y los observadores nacionales e internacionales, velar que se cumpla con las leyes y el respeto a la voluntad popular.