San Francisco de Macorís.- El llamado a huelga municipal en esta ciudad hecho por la Asociación de Comerciantes del Antiguo Mercado (ASOCAMER) y el FALPO para el 25 de noviembre, en demanda de la entrega de una plaza comercial construida por el gobierno, fue dejado sin efecto tras los acuerdos arribados entre un patronato y el cabildo, que se disputaban el control de la edificación.
La semana pasada, comerciantes organizados acompañados de dirigentes del FALPO y de FELABEL, realizaron una rueda de prensa en la que emplazaron a las autoridades competentes, a la entrega de los locales de la Plaza Comercial “Juan Pablo Duarte”, anunciando la programación de una serie de protestas que culminaría con un paro municipal por 24 horas, a efectuarse el próximo miércoles, dejado sin efecto tras el acuerdo arribado este domingo con autoridades locales.
La construcción de la referida plaza comercial fue dispuesta por el gobierno central para beneficiar a comerciantes afectados por un incendió en el antiguo mercado, pero a dos años y medio de su terminación, permanece cerrada porque el cabildo reclama que es patrimonio municipal y le corresponde su administración, objetando el Decreto 174-14, mediante el cual el presidente Danilo Medina formalizó un patronato que preside el Obispo Fausto Mejía Vallejo, que se encargaría de dirigirla.
Mientras avanzaban los preparativos para el paro del comercio y demás actividades en San Francisco de Macorís, el patronato desarrollaba reuniones con la asociación de comerciantes y luego con el ayuntamiento, y este domingo las partes llegaron a un acuerdo mediante el cual, el patronato cedió el control de la Plaza “Juan Pablo Duarte” y entregó las llaves al cabildo, mientras que el patronato se encargaría de la limpieza y mantenimiento, para lo cual los arrendatarios deberán pagar una cuota adicional al alquiler.
Este lunes la Sala Capitular del ayuntamiento de San Francisco de Macorís se reunirá a los fines de legitimar los acuerdos arribados con el patronato de la Plaza “Juan Pablo Duarte” y de definir los términos del contrato que deberán firmar los comerciantes.
A salir del encuentro, comerciantes manifestaron su agradecimiento al FALPO, porque luego de casi tres años de espera y de estar “prácticamente quebrados”, afectados por un conflicto de intereses entre el poder municipal y el gobierno central, gracias al acompañamiento de la organización popular en su lucha, lograron que su clamor fuera escuchado por las autoridades y poder volver a sus actividades comerciales para producir el sustento de sus familias.