Cohabitación política

Franklin Almeyda [email protected]ón es un verbo que empezó a aplicarse en Francia como parte del vocabulario político desde 1977. Se trata de acuerdos entre organizaciones políticas contrapuestas; por su significado…

Franklin Almeyda Rancier
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Cohabitación es un verbo que empezó a aplicarse en Francia como parte del vocabulario político desde 1977. Se trata de acuerdos entre organizaciones políticas contrapuestas; por su significado se ha llevado a la convivencia de fuerzas diversas dentro de una misma organización. Cuando el profesor Bosch en 1969 exploraba sobre el manejo del proceso político dominicano, estando en el PRD, le hice una propuesta en una carta que recientemente incluí en el libro “El PLD y las Fuerzas Sociales” (2012-2015) y que las ideas expuestas fueron recogidas en un artículo que nos publicó el vespertino El Nacional en aquel año de 1969, bajo el título de “PRD partido-frente”.
Decía que el PRD estaba integrado por fuerzas sociales distintas y a veces contrapuestas, por lo que había que considerar esa diversidad a los fines de darle una estructura organizativa y definir sus objetivos ideológicos.
Al profesor Bosch le resultó interesante y pasó a considerarla. Investigaba y se preparaba sobre los conceptos ideológicos; publicó un primer ensayo ahora más vigente que ayer “El Pentagonismo Sustituto del Imperialismo”; también “Composición Social Dominicana”; “De Cristóbal Colón a Fidel Castro”; y unos cuatro títulos más. Todos utilizados para la formación política. Regresó al país en abril de 1970 y empezó de inmediato a tratar de “cualificar la militancia del PRD sin desperdiciar la cantidad”. Integró un “Grupo Teórico” llamándonos a participar. Lo formábamos él (Bosch) que lo dirigía, Tonito Abreu, José Joaquín Bidó Medina, Rafaelito Alburquerque Castro, Milagros Ortiz, Hatuey de Camps, Diómedes Mercedes, Cheché Luna y yo.

En la contraportada de la “Revista Política Teoría y Acción”, la cual empezó a publicarse iniciándose el 1972 estando aún todos en el PRD, figuran los nombres de los nueve; de esos, solo Hatuey se negó a participar en la fundación del PLD en 1973. Ese “Grupo Teórico” se reunía, dirigido por Bosch, todos los lunes, por lo que entre los temas de agenda se debatía la línea organizativa y definiciones ideológicas del PRD y luego del PLD ya fundado en 1973.

Bosch desestimó la propuesta de Partido-Frente bajo el argumento de que en medio de la confrontación bipolar y la guerra fría no era posible; llegó a escribirlo y publicarlo en uno de los libros sobre el partido, afirmando que las fuerzas internas más conservadoras tendrían mayor predominio por sus vínculos naturales a las fuerzas gobernantes del país y puso como referencia el Partido Justicialista, de Juan Domingo Perón en Argentina, que era de una diversidad interna y los jóvenes progresistas se colocaban a la defensiva.

Hablábamos de partido-frente, más luego y a partir del año 1977 los franceses utilizan el vocablo cohabitación para referirse a acuerdos entre fuerzas políticas diversas. Ahora, a la vuelta de cuatro décadas, cuando todas las circunstancias de política internacional tienen otro giro, al PLD le ha sucedido que para participar con éxito en los procesos electorales ha tenido que masificarse reventando su estructura cerrada. Es evidente que sufre una crisis estructural que debe considerarse.

Las aguas desbordaron el cauce del río, creando tendencias y diversidad que paraliza su estructura formal. El PLD está obligado a hablar de cohabitación política interna. Debe debatir cómo readecuarse para que siga desplegando fuerza y dinámica de cambios en beneficio del pueblo.

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