El 13 de enero de hace ya 49 años se fundó en Santo Domingo la Serigrafía Artística, una aventura en el arte del pintor Félix Gontier (Cocó) y del subcomandante de Abril Alfredo Cordero. Desde esa fecha hasta nuestros días la serigrafía en República Dominicana ha tenido a dos de los mejores artistas en reproducciones fuera de serie, y que junto a los artistas creadores de las obras originales recrean y crean una nueva obra de gran belleza.
Una reproducción en pintura o dibujo es la multiplicación de cualquier obra de arte hecha a partir de un original, creada a través de un proceso de transferencia. Hay diversos tipos de reproducciones, y su proceso está en constante evolución, pero las técnicas más conocidas son las del grabado, litografía, serigrafía, fotografía y, ahora, la de lienzografía.
En el taller, casi al comienzo de la calle Las Damas, Cocó y Alfredo reciben a diario a artistas dominicanos, puertorriqueños, españoles y de otras nacionalidades con una calidez que hacen de ese espacio de trabajo un sitio entrañable. Pero no solo pintores o dibujantes puede uno encontrar allí, también los visitan con regularidad, y sobre todo cuando Alfredo prepara paellas, personalidades como Felipe Alou, Danny Rivera, Orlando Menicucci, Margarita Cordero o Inés Aizpún. La experiencia de ver en detalles el proceso de creación de una serigrafía es algo que debe experimentar todo amante de las Bellas Artes.
En la serigrafía una imagen se dibuja o se corta en una hoja de plástico, o en una hoja de papel, creando una plantilla. Esta plantilla se coloca entonces en un marco, que tiene una capa de malla fina formando una “pantalla”. Una hoja de papel se coloca debajo de la pantalla y se aplica pintura, la tinta es empujada a través de la plantilla desde arriba, usando una hoja de caucho o escobilla de goma, impregnando sólo porciones del corte del patrón de impresión. Además de las plantillas, una imagen fotográfica puede ser reproducida en la pantalla utilizando gelatinas sensibles a la luz. Esto fue una innovación de gran importancia para Andy Warhol y otros miembros de la generación pop, que se dedicaron a apropiarse de fotografías e imágenes comerciales populares aprovechando estas técnicas.
De forma independiente, Cocó Gontier y Alfredo Cordero son dos artistas con obras propias. Cocó fue co-fundador del grupo Proyecta y autor con obras en los principales museos dominicanos, también autor del libro “Huellas de amor” junto a Guillermo Piña; y Alfredo es creador de sillas intervenidas y de pinturas fantásticas con pedazos de cerámica y vidrio, como su “Juana la loca” o “El ojo de Abel”, dos genialidades en ambas técnicas.