Con la firma este sábado del gobernador Jerry Brown, entró en vigor en California una ley que impedirá que las policías locales colaboren con el Servicio de Migración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) en la detención de inmigrantes indocumentados que no hayan cometido delitos serios, de acuerdo con lo publicado por BBC Mundo.
La nueva legislación, bautizada como AB4, busca poner fin a las miles de deportaciones que se han hecho a través del controversial programa de ICE Comunidades Seguras, por el que han sido deportadas decenas de miles de personas.
Según recuerda desde Los Ángeles el periodista de BBC Mundo Jaime González, la entrada en vigor de esta ley se produce tres días después de que el gobernador Brown firmara otra ley que permitirá que los indocumentados puedan sacarse la licencia de conducir en California.
Por otro lado, este sábado miles de personas han salido a las calles de las principales ciudades de EE.UU. en apoyo a la aprobación de una ley de reforma migratoria.
Las marchas se producen mientras las conversaciones de los legisladores de la Cámara de Representantes sobre un plan de reforma migratoria se encuentran estancadas
En julio pasado el Senado estadounidense aprobó un proyecto de reforma que ofrece un camino para la legalización de los cerca de 11 millones de indocumentados que se cree viven en EE.UU.