Santiago.-Los casos de influenza A y B comienzan a copar las clínicas y hospitales de Santiago, sumándose otro problema con el supuesto brote de tuberculosis en el hospital regional José María Cabral y Báez.
El ex presidente de la Sociedad de Neumología de la región Norte (Neumonorte), Plutarco Arias, dijo que a su consultorio acuden entre siete y diez pacientes con esos dos tipos de influenza.
Arias entiende que esto debe mover más a preocupación que los presuntos casos de tuberculosis. Explicó que la influenza se debe a los cambios de clima y la humedad.
“Lo que veo es que hay cientos de caso de influenza y no hay muchas vacunas en los centros de salud”, apuntó el neumólogo.
En tanto, que la Universidad Autónoma de Santo Domingo, (UASD), acordó mantener pese a brote tuberculosis a sus docentes en el hospital regional José María Cabral y Báez.
Durante la visita realizada por una comisión de alto nivel de la casa de estudios superiores al director del centro de salud, Ernesto Rodríguez, explica que continuarán de manera plena y total, al entender que no hay razones para retirarlos.
La comitiva académica estuvo integrada por los doctores Genaro Rodríguez, director general del Cursa-Uasd, Wilson Mejía, decano de la Facultad de Ciencias de la Salud y Carlos Sánchez, decano de la Facultad de Planificación Académica, quienes manifestaron su solidaridad con las autoridades del hospital, por entender que han tenido un manejo adecuado en el caso del brote de tuberculosis detectado en el mismo.
Genaro Rodríguez dijo que en este caso se han aplicado de forma correcta las normas y protocolos internacionales de salud que se activan en estas circunstancias, y por lo tanto no abandonarán las instalaciones ni dejarán solos a los pacientes de este hospital, que son los más pobres y quienes más los necesitan.
También, previno a la población aconsejando no prestar atención a las informaciones infundadas y mal intencionadas que crean desasosiego entre la gente más vulnerable, condicionándola a no acudir a los centros públicos, y llevándola a involucrarse en compromisos económicos imposibles.