No te impacientes cuando algunos ciegos actúen delante de ti como videntes, sólo presumen. El amor es la llama que alumbra el alma, lo demás es más de lo mismo, vanidad, insatisfacción e inseguridad. Quienes reconocen tus valores, te darán tu lugar. No necesitas empujar, manipular o seducir para conquistarlo, mucho menos mendigar cariño, aceptación o reconocimiento, te amarán en todo tiempo, ¡porque son genuinos! No se valen de las circunstancias para desecharte, ¡más bien las aprovechan para mostrarte cuánto les importas! No te siguen por lo que representas para sus vidas, son incondicionales, pese a todo. Entre estos permanece, con amistad coherente, sincera y constante. ¡Dios nos muestra su gran amor “acomodándonos” en los asientos más exclusivos de los corazones más cálidos y nobles!
¡Asiento de honor!
No te impacientes cuando algunos ciegos actúen delante de ti como videntes, sólo presumen. El amor es la llama que alumbra el alma, lo demás es más de lo mismo, vanidad, insatisfacción e inseguridad. Quienes reconocen tus valores, te darán tu…