Geometrías desestabilizadas, ambigüedades visuales, contenidos inestables: el arte conceptual latinoamericano de los años 30-70 llega al Museo Reina Sofía de Madrid gracias a una colaboración con la venezolana Fundación Cisneros, que por primera vez presenta su colección en Europa.
“Es la exhibición más extensa que hemos presentado jamás” tanto en Latinoamérica como en Estados Unidos, donde la colección se había expuesto hasta ahora, explicó este lunes Patricia Phelps de Cisneros en la presentación de la muestra en el Reina Sofía, donde podrá visitarse desde el miércoles hasta el 16 de septiembre.
Formada por “obras muy revolucionarias en su momento”, la exposición quiere dar “una visión de una Sudamérica con un pensamiento conceptual muy sofisticado”, explicó la esposa del multimillonario venezolano Gustavo Cisneros, calificado en 2010 por el New York Times como una de las figuras más influyentes de América Latina.
Estructurada en cinco “intenciones artísticas” -desde la geometría como metáfora del universo hasta la desmaterialización de la obra- la muestra, compuesta por unos 200 cuadros, esculturas e instalaciones, recibe al visitante con una inmensa “fisicromía” del venezolano Carlos Cruz-Díez.
“Cuando Patricia empezó a coleccionar este tipo de obras en los años 80 y 90, muchos de estos artistas eran todavía desconocidos fuera de Latinoamérica, pero hoy en día no hay una exposición que se precie que no tenga piezas de Oiticica o de Clark”, señala Manuel Borja-Villel, director del Museo Reina Sofía y también comisario de la muestra.
Llas obras de arte en esta exposición funcionan como un manifiesto visual con el que sus creadores quieren demostrar que la abstracción es un lenguaje y no un significado fijo.
A veces incomprendidos, estos artistas, más de una veintena, cuya voluntad era “cuestionar una serie de convenciones sociales que nos atenazan”, pretendían “como los europeos ser absolutamente universales”, defiende Borja-Villel.
Esta exposición responde a la voluntad de la Fundación Cisneros de “creer en Latinoamérica, en nuestra cultura, y darla a conocer al mundo porque estamos orgullosos de ella”, explica Patricia Phelps.