La Policía Nacional, junto al Ministerio Público, recuperó ayer un cargamento de pañales desechables robados de un garaje en la comunidad de Boca Chica.Desde primeras horas de la mañana, los agentes rodearon una casa por más de quince horas, a la espera de que llegara la orden de allanamiento.
A las 12:03 de la tarde, los agentes policiales penetraron a la residencia y encontraron la mercancía que pertenecía a la empresa Máximo Gómez C. por A., cuyo valor supera los tres millones de pesos.
Los pañales desechables, al igual que toallas sanitarias estaban almacenados en cientos de cajas, en los garajes de la suntuosa vivienda, ubicada en el Residencial Las Américas, en una zona apartada y boscosa del municipio Boca Chica. En la residencia solo se encontraban dos jóvenes esposos de nacionalidad haitiana, que luego fueron detenidos para fines de investigación.
Los extranjeros, entre lágrimas y con manos temblorosas explicaron que no saben nada de lo ocurrido que a ellos se les paga RD$5,000 para cuidar la casa, pero que no conocen a los dueños.
Además de las cajas con la mercancía, los agentes encontraron un bulto que fue quemado, el cual contenía fotos familiares, documentos de una compañía de taxi, varios cheques a nombre de Luís Armando Solano y un expediente de lavado de activos del 2010.
Las labores fueron encabezadas por el teniente coronel Francisco Pérez, subdirector de la Dirección de Investigaciones Criminales en Boca Chica.
“Entramos al lugar y en la búsqueda pudimos encontrar en el garaje y en el segundo nivel la mercancía que fue robada”, explicó el fiscal Félix Contreras, quien dijo que recibieron la denuncia del robo y de inmediato comenzaron las investigaciones. Agregó que apresaron a uno de los integrantes de la red, quien les dijo que parte de la mercancía estaba ubicada en dicha casa.
Los asaltantes ataron y encañonaron al vigilante
Para robar los pañales, los desconocidos penetraron encapuchados al garaje ubicado en Boca Chica y ataron al vigilante de seguridad para cargar con los contenedores con la mercancía.
Luego de la acción delictual, el dueño de los contenedores, Frank Pagán, se dirigió a la Policía Nacional junto al vigilante, y presentó una formal denuncia por el hecho.