El procurador general de la República reveló que según los resultados del informe del centro de operaciones de emergencias en las pasadas celebraciones navideñas hubo un total de 65 menores de edad que recibieron asistencia médica por la ingesta de alcohol.
Francisco Domínguez Brito indicó también que al consumo de alcohol por parte de menores, que es un hecho grave, se suma la venta que se está realizando de este producto adulterado.
El magistrado indicó que aumentó la cantidad de menores que ingirieron bebidas alcohólicas en el periodo navideño, que en para esa época del 2012 fue de 20.
En ese sentido, advirtió que los padres pueden ser sancionados con penas de dos a cinco años de prisión y que quienes se dedican a vender bebidas adulteradas, a consecuencia de lo cual muera algún menor, pueden ser procesados por homicidio.
Domínguez Brito dijo que ya tienen dos procesos abiertos de padres cuyos hijos menores ingirieron bebidas alcohólicas y que continuarán detectando los casos y sometiendo a los responsables.
“Para garantizar un futuro promisorio en nuestra juventud, los llamados a dirigir el destino de nuestra nación debemos velar para que los niños y niñas de hoy tengan un presente bajo condiciones que permitan su sano desarrollo”, adujo. En ese sentido, el procurador señaló que lanzó una cruzada para combatir la ingesta de alcohol en niños.