Las inmediaciones de los centros de votaciones del Distrito Nacional fueron lugares estratégicos para los vendedores informales de comidas rápidas, a los que acudían las personas para mitigar la sed y el hambre del intenso domingo electoral.
Entre estos alimentos se exhibían las empanadas, tostadas, quesos y frituras. En cuanto a las bebidas, se observaron ventas de refrescos, botellas de agua, helados y los famosos “frío-frío”, entre otros.
Algunos de estos comercios estaban instalados de manera improvisada en mesas, mientras otros en casetas, y unos pocos en locales formales. Un equipo de elCaribe comprobó que estos negocios informales acostumbran a comercializar en el área, en tanto que otros solo vendían sus comidas durante los comicios electorales.
Uno de los vendedores que llegó desde muy tempranas horas de la mañana a los alrededores del centro de votación del Club Los Prados, fue Fausto Pujols, que es un comerciante de comida chatarra, como también se le conoce a este tipo de alimentos.
Pujols instaló una mesa improvisada con varios productos fritos, como son salami, chorizo y los famosos tostones que acompañan a estos embutidos.
Este negociante se ubicó en la calle Osvaldo Bazil del sector Los Prados, cerca del club que lleva el mismo nombre, donde acudieron a votar los residentes cercanos de ese lugar y zonas aledañas.
En esa misma calle estaba instalado un puesto de venta de helados llamado Fruti Cepis de una simpática dama de origen extranjero, llamada Zaida Quintero, quien dijo ser oriunda de Venezuela.
Quintero explicó que esa era su segunda vez en realizar esas ventas en un proceso electoral del país. El primero fue en febrero pasado durante las elecciones municipales.
Cercana al Club también se encontraba Joselyn Álvarez Carrasco, una vendedora que como cada año electoral se instala con su mesa, en la que vende desde tostadas, jugos y café, entre otros.
Álvarez Carrasco dijo tener 12 años comercializando sus productos en los alrededores del Club Los Prados durante cada proceso electoral. Aseguró que en cada comicio siempre logra vender todos sus artículos, lo que la motiva a asistir en cada periodo.
Mientras en las cercanías del colegio Babeque, el cual está ubicado en la calle Socorro Sánchez, se pudo observar a un señor de nacionalidad haitiana quien con una paletera saciaba el hambre al que en ese momento deseaba comer alguna ‘chuchería’ como se le suele decir en el argot popular.
Se trata de Moluer Arsimedy, quien narró entusiasmadamente que tiene en el puesto desde comienzos del año 2000, lo que le ha permitido vender en cada uno de los procesos electorales que han ocurridos desde esos años hasta la actualidad.
Al equipo de elCaribe trasladarse al sector de Villa Juana, encontró al joven Enmanuel Zorrilla, un tímido vendedor de empanadas o “yaniqueques” como también son conocidas esas delicias hechas con harina y fritas en aceite. Zorrilla explicó que tiene alrededor de dos meses con el negocio y realiza esta labor todos los días.
En otra ruta realizada en el sector de Cristo Rey se pudo observar que las ventas de los negocios informales de comidas chatarras primaron durante las elecciones presidenciales.
Votaciones se realizan en orden en el DN
Durante el derecho al sufragio realizado en el día de ayer para elegir a las principales autoridades que dirigirán el país para el cuatrienio 2024-2028, los votantes aplaudieron el buen funcionamiento del proceso electoral mientras salían de los colegios electorales. “En el proceso hay mucha organización. Es muy parecida a la de Estados Unidos”, expresó Ernesto Sánchez. En otros centros de votación también se observó organización en el proceso.