El Ministerio de Salud Pública, el Servicio Nacional de Salud (SNS) y un conjunto de organizaciones médicas, académicas, sindicales, religiosas, comunitarias y empresariales se comprometieron ayer a aunar esfuerzos para reducir la tasa de mortalidad materna de 104 a 70 por 100 mil nacidos vivos de cara al año 2030.
“La Alianza Nacional para la Aceleración de la Reducción de la Mortalidad Materna e Infantil” abarca una campaña educativa en los medios de comunicación, la captación de las mujeres embarazadas para el seguimiento y atención médica oportuna y el lanzamiento de la aplicación “Mi bebé, mi vida”, mediante la cual las gestantes recibirán en sus celulares consejos de nutrición, alertas de salud y qué hacer y dónde acudir en caso de emergencia.
Durante un acto masivo en el Palacio de los Deportes con la presencia de la Vicepresidenta de la República, Margarita Cedeño, los ministros de Economía, Planificación y Desarrollo y de la Mujer, y representantes de organismos de cooperación internacional, el director del SNS, Chanel Rosa Chupany, reconoció que se trata de un gran desafío que debe contar con el concurso de todos los sectores de la sociedad que, en lo adelante, deberán asumir su cuota de responsabilidad para reducir los riesgos y desigualdades sociales que enfrentan las mujeres durante la maternidad.
Sostuvo que una de las acciones específicas para lograr la meta país de reducir la mortalidad infantil a 18 por cada mil nacidos vivos y la neonatal a 12 por mil nacidos vivos, es la captación de las embarazadas de cada comunidad por parte de los servicios de salud para su seguimiento y atención hasta el parto.
RD$400 millones en equipos
Dijo que el SNS ha desplegado importantes esfuerzos en esa dirección con la capacitación y designación de más de 8 mil profesionales en los hospitales, y la inversión de más de RD$ 400 millones en el equipamiento de maternidades del país.
De su lado, el Ministro de Salud, Rafael Sánchez Cárdenas, dijo que esta meta está alineada con la Estrategia Nacional de Desarrollo, los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y el Plan para la prevención de desarrollo adolescente lanzado este año por la Vicepresidencia.
Sostuvo que reducir la mortalidad materno-infantil es un asunto de derechos humanos y de “vergüenza de una nación” por lo que se ha constituido en un desafío impostergable para el país.
Dijo que para lograr la meta es imprescindible el compromiso del personal de salud, las familias y de la ciudadanía, por lo que exhortó a la población a hacer vigilancia social para monitorear el cumplimiento de esta aspiración.
Explicó que las embarazadas captadas recibirán orientación oportuna sobre las señales de alarma que podrían desencadenar en cualquiera de las tres causales de muertes maternas como hipertensión, infecciones y hemorragias, las cuales deberán ser notificadas por una especie de tutor al sistema para evitar su agravamiento.
3,494 bebés y 197 mujeres murieron el año pasado
El director del Programa de Medicamentos Esenciales (Promese), Enriquillo Matos, se comprometió a mejorar el acceso a los medicamentos para las madres e infantes y el presidente de la Asociación Dominicana de Facultades de Escuelas de Medicina, William Duque, a que las academias capaciten los recursos humanos del sector con las competencias y calidad requeridas.
El año pasado fallecieron 3,494 recién nacidos y 197 mujeres durante el parto, post parto y puerperio según el boletín epidemiológico del Ministerio de Salud Pública.